JESUS VENCE A LA MUERTE Y VIVE PARA SIEMPRE

  Ni la pandemia ha podido impedir que la Noche Santa volviera a irrumpir para siempre el grito que cambiará al mundo, que reescribirá la vida de los hombres:

¡Cristo resucitó y está vivo!

4 y 5 de Abril

Del grano muerto de trigo, brotó el milagro de la espiga nueva.

 Una vida diferente, sin sombra alguna de muerte, se hizo dueña de la situación dentro de aquel sepulcro vigilado

Hoy es el día más importante en la liturgia de la Iglesia. Celebramos el acontecimiento más importante en la historia de la humanidad. Cristo ha vencido a la muerte y nos ha hecho el regalo de la Resurrección, que hace realidad la promesa de vida eterna. “Si Cristo no hubiera resucitado, vana sería nuestra fe” (1 Cor 15,14). 

La Resurrección, y el encuentro con el Resucitado, fueron los eventos que hicieron comprender a los apóstoles todo lo que el Señor les había anunciado pero que ellos no habían comprendido a cabalidad.

Lo ocurrido en la mañana gloriosa de aquél domingo en que Jesús resucitó. El pasaje nos muestra a María Magdalena llegando al sepulcro de madrugada y encontrando quitada la lápida del sepulcro. Inmediatamente dio razón del acontecimiento a Pedro y al “discípulo a quien tanto quería Jesús”, quienes salieron corriendo hacia el sepulcro.

El Señor pasa. ¡Ya siento que pasas! Compartirá mi soledad, tristeza y mi falta de movilidad.¡ARRIBA LOS CORAZONES! ¡SURSUM CORDA! ¡ES PASCUA! Vivirla con compromisos fuertes.

VIVIMOS DE FORMA DISTINTA

Hemos conocido a Cristo .................por tanto somos  cristiano y tenemos  que vivir  de forma distinta.

Empezamos  a vivir con la Luz de la Fe, la Resurrección  es el centro de la Fe.

Dios Nuestro Padre lo confirmó en el monte Tabor, lo sello en el Jordán y hoy lo hace triunfante, sale triunfante del sepulcro.

Abrazamos el Amor de Dios y nuestros hermanos.

El Señor pasa. ¡Ya siento que pasas! Compartirá mi soledad, tristeza y mi falta de movilidad.¡ARRIBA LOS CORAZONES! ¡SURSUM CORDA! ¡ES PASCUA! Vivirla con compromisos fuertes.

En el Evangelio de hoy nos encontramos con el miedo de las mujeres se han encontrado con el sepulcro vacío. Vacío, si Señor, está vacío porque Tu has Resucitado y nos guardas de la muerte definitiva gracias al Espíritu Santo que ha sido derramado en nuestro corazón, un corazón nuevo y lleno de Luz.

Ahora te puedo buscar en la parroquia, los apóstoles  testigos de Tu Resurrección  pero tienen sus miedos .................nosotros gracias a la fe de nuestros padres creemos en T

A NOSOTROS

 Atrévete a gritar hoy y siempre ¡Cristo vive! 

Porque es el grito de guerra de los que creemos en Jesús y nos da una clave nueva para entender las cosas de siempre: el tiempo, el amor, la cruz, la vida, el otro... ¡Cristo vive!

 Hay que gritarlo a los cuatro vientos. Qué tristeza tan grande no enterarse de esta noticia: 

¡Hay tanta gente necesitando saberlo! ¡Cristo vive en mi! Solo una vida que cruce las fronteras de la existencia terrena merece ser llamada verdadera. Ahora todo es diferente, ahora vivo de verdad ¡Aleluya! ¡Feliz Pascua de Resurrección!