ORACIONES SEMANA A SEMANA 7 y 8 T ORDINARIO

 

No hay mayor grandeza que .......................amarte Señor

Me llamaste Señor a caminar siempre contigo y ante Ti yo digo: Creo en Ti Señor. Dame tu visa, dame la gracia, dame tu mano quiero ir contigo, vivir contigo siempre mi Señor Te amaré Señor, Te amare Señor solo encuentro la paz y alegría muy cerca de Ti. Señor , nos rodean muchas complicaciones y tal vez , tal vez, nos olvidamos del Amor de Dios porque pensamos más en nosotros mismos.

OCTAVA SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO

SÓLO TÚ SEÑOR

 Sólo Tú puedes llegar al fondo de cada persona y de su verdad.Por eso mismo Señor me importan muy poco los juicios del mundo o el qué dirán. Entre otras cosas porque ese mundo se deja llevar por lo artificial o visible y sólo Tú eres capaz de llegar a la entraña de mi existencia y de mi toda verdad. Sólo Tú permaneces más allá de todo ello.

Soy un árbol plantado el día de mi Bautismo y quieres  Señor que de frutos buenos porque estoy injertado en la cruz, en la mesa y en la Palabra por tanto al salir al mundo tengo que dar frutos  de los buenos que te a gradan Señor y hacen bien a los que me rodean. 

L

He descubierto tu tesoro, amor entero y triunfo auténtico y ha cambiado totalmente mi vida produciendo alegría profunda y contagiosa.

Y a Ti Señor te llena el alma y cualquier cosa que no sea amor no te interesa. Que siempre siempre ame dando lo mejor de mí. 

M

No soy más que tú Señor. 

Ser tu seguidor cuesta Tu diste tu vida. Amar y querer a todos cuesta, servir aunque no lo deseen no es fácil. Yo tengo que caminar y caminar mirando al cielo y dejando cosas y más cosas por ese camino.

No hay vino de calidad si el viñador no poda la cepa. 

Y sin olvidar que no hay camino cristianó si vía crucis. 

SEPTIMA SEMANA

Mi vida cristiana no puede ser un carnaval. Donde nos ocultamos para aparentar lo que no somos. Entre otras cosas, nuestra vida cristiana, no puede ser un carnaval porque, Dios, siempre sabe quién se esconde detrás.

¡QUITA, MI MÁSCARA, SEÑOR! 

 La de la sordera, para que pueda escuchar con nitidez tu voz También la del odio,  la de la debilidad, para que presente mi mejilla donde sea necesario, la del egoísmo, para que nunca mire lo qué doy ni a quién doy. La de la discordia, para que vea amigos y no adversarios

Señor a veces soy tu enemigo por lo que digo y hago y Tu me amas. Gracias Señor porque siendo como soy Tu me quieres. Haz que nunca olvide amar a los míos y, como hiciste tu, salír de los tuyos para amar a los demás solo así estaré contigo. 

SI me falta el amor no me sirve de nada porque nada soy. 

L

Señor que de mi corazón desaparezca la rivalidad y vea a ella como no rival.

Tengo fe Señor pero es debil por eso te pido que la aumentes. Yo rezo pero me da la sensación que no es una oración totalmente transparente por eso algunas cosas de las que me ocurren no puedo sanarlas por mi  mismo.

En mi  casa sabes muy bien que hay fe pero sabes como es y lo que necesito en estos momentos. Te necesito Señor mas que nunca,

M

Señor, hoy siento una alegría grande en mi corazón al llegar a la oración y leer tu Palabra. Como a Pedro, también me haces a mí la entrega “de las llaves”. No las llaves de la Iglesia, pues soy pequeño y no pretendo dirigir nada. Me das las llaves de tu “propio corazón”. Con esas llaves puedo abrir y asomarme al misterio de tu amor. Y, al mismo tiempo, yo también te entrego las llaves de mi corazón para que puedas invitar a entrar en él a los pobres, tus preferidos.

X

Señor Jesús, te mire por donde te mire, siempre me sorprendes, siempre me ensanchas el corazón. Te agradezco esa amplitud de miras, ese buscar siempre lo bueno, lo positivo que hay en el corazón de cada uno, ese ir siempre por delante poniendo la semilla del bien. Es verdad que en el mundo no todo es trigo limpio, hay también cizaña. Pero cuando quiere crecer la cizaña, el campo está sembrado de trigo. Y tú esperas que el trigo se apodere de la cizaña y que el bien se imponga sobre el mal. En este mundo nunca es tiempo de arrancar; siempre es tiempo de sembrar.

J

Dame Señor la gracia para vivir siempre siendo sal, que no estropee su efecto de conservar y dar sabor a este mundo tan triste, soso y preocupado por cosas que no vienen de Ti.

Que en tu Iglesia terminen los abusos. 

V

Señor, yo quiero darte gracias por lo maravilloso que eres. 

Tú eres Amor y quieres unión y crear siempre comunión. Si nos salimos de ti estamos perdidos y vienen los conflictos y peleas. Que tú gloria en mi Señor sea más fuerte que la fuerza discregadora del mal. 

M Dolorosa te pido por el final de la guerra pero también para el cambio de la mente de los políticos y de mi hermana. 

S

Hoy, Señor, quiero hacer mi oración con el encanto, la sencillez y la espontaneidad de los niños. Sólo si tengo corazón de niño me atreveré a hablarte como a mi Abbá, mi papá. Es la palabra que usaba Jesús cuando hablaba contigo. No vengo a ti a pedirte nada. Me conformo con que Tú siempre seas mi “papá”. Contigo lo tengo todo.