IMAGENES DE LA ALMUDENA

SANTA MARÍA DE LA VEGA

 Según cuenta la leyenda, la imagen de la Virgen, fue traída a España por el propio Apóstol Santiago cuando vino a predicar. Lo que sí es cierto es que en la pequeña villa se consideró como Patrona, la imagen que se veneraba como Santa María de la Vega.


 Según la tradición, ante la invasión de los sarracenos en el 711, los cristianos con el temor a que la imagen fuera profanada, fue escondida dentro de un cubo de la muralla, olvidándose con el tiempo su ubicación.





Cuando Alfonso VI conquistó Magerit en 1085, encabezó una procesión, que al llegar a la altura de la muralla cercana a la Almudayna, vieron cómo se desprendían unas piedras y en el hueco que se produjo encontraron la imagen de la Virgen con 2 cirios encendidos. Era el 9 de noviembre de 1085. En su lugar, mas o menos, se puede ver una reproducción de la imagen.

En la actualidad


NUESTRA SEÑORA DE LA FLOR DE LIS.

 Lo que muchos ignoran, es que mientras estuvo desaparecida, el rey mando pintar esta imagen mural de la Virgen que presidía la iglesia y que según dicen, se inspiró en el rostro de su esposa Doña Constanza, hija del rey francés Enrique I, colocando en su honor una flor de lis en su mano.

 Por eso también se la considera patrona de Madrid "en sede vacante". Desde 1868, que se derribó la primitiva iglesia, juntas permanecieron en la cercana Iglesia de Sacramento (Las Bernardas) hasta que en 1911 ambas se trasladaron a la Cripta de la Almudena en donde la Virgen de la Flor de Lis permanece hoy en día siendo una de las joyas que atesora y que muchos madrileños desconocen.

NUESTRA SEÑORA DE LA ALMUDENA


Existe documentación del año 1382, en que se nombra con el título de "Almudena" a una imagen de la Virgen, a la que el pueblo de Madrid siempre ha venerado con singular devoción.

 La imagen actual de la Virgen de la Almudena fue coronada solemnemente el 10 de Noviembre de 1948 y declarada patrona de la diócesis de Madrid por el papa Pablo VI el 1 de julio de 1977. También hoy, a cualquier hara del día y de la noche, se venera cariñosamente por los madrileños la imagen en piedra de Nuestra Señora de la Almudena situada en los muros del complejo catedralicio.