YA ES SEMANA SANTA

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miércoles, 17 de diciembre de 2025

NUESTRA SEÑORA DE LA ESPERANZA

Hoy, 18 de diciembre, se celebra la fiesta de Nuestra Señora de la Esperanza.



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Nuestra Señora de la O, o de la Virgen de la Esperanza o de la Expectación del Parto, es una festividad genuinamente española, habiendo sido instituida por los Padres del X Concilio de Toledo en el año 656,presidido por su obispo San Eugenio III, fijándola ocho días antes de la Natividad de Jesús, el 18 de diciembre.

 Con ella los obispos querían resaltar la fiesta de la Anunciación -25 de marzo- ,que por caer muchos años en plena cuaresma,no permitía celebrar con el debido esplendor el misterio de la Encarnación del Verbo y el estado de buena esperanza de María.


Virgen encinta de la iglesia de la Concepción (Toro), siglo XV.

  Este nombre, de Nuestra Señora de la O, le viene a María porque las siete estrofas de Vísperas, que preceden a la Navidad, empiezan por “OH”, signo de expectativa y esperanza del pueblo de Israel, y especialmente de María, en la llegada de un salvador. Por lo que
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Virgen de la O es sinónimo de Virgen de la Esperanza. Virgen encinta, Virgen de la Divina Enfermera A dvocación mariana en la que se la asocia con el Adviento o espera de la Natividad de Cristo (además de con la virtud teologal de la esperanza); el período en que la Virgen María estaba embarazada (en latín Maria Gravida o Virgo Gestans).

TERCER DOMINGO DE ADVIENTO

JUEVES

“ Se le apareció en sueños un ángel del Señor ”



según san Mateo 1, 18-24

 La generación de Jesucristo fue de esta manera: María, su madre, estaba desposada con José y, antes de vivir juntos, resultó que ella esperaba un hijo por obra del Espíritu Santo. 

Cuando María da señales de embarazo, José percibe que María está tocada por el misterio de Dios. Y, ante la cercanía de Dios, todo hombre religioso tiende a huir. Y piensa: María está llena de Dios. María es demasiado para mí. ¡No la merezco!

José, su esposo, como era justo y no quería difamarla, decidió repudiarla en privado. Pero, apenas había tomado esta resolución, se le apareció en sueños un ángel del Señor que le dijo: «José, hijo de David, no temas acoger a María, tu mujer, porque la criatura que hay en ella viene del Espíritu Santo. 

el Ángel le dice a San José: “No temas tomar contigo a María”. Aquí se descubre la gran humildad de José, el hombre que quiere vivir en el anonimato, sin ningún protagonismo de nada.

Dará a luz un hijo y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de los pecados». 

Todo esto sucedió para que se cumpliese lo que habla dicho el Señor por medio del profeta: «Mirad: la virgen concebirá y dará a luz un hijo y le pondrán por nombre Emmanuel, que significa “Dios-con-nosotros”». 

¿Qué vio Dios en María para ser elegida como madre suya? “Ha mirado la pequeñez de su esclava” (Lc. 1,48). ¿Y qué ha visto Dios en San José para ser el que asuma el oficio de padre de Jesús? Su gran humildad. Notemos que José asume este oficio en calidad de “igualdad” con su esposa

Cuando José se despertó, hizo  lo que le había mandado el ángel del Señor y acogió a su mujer.


Señor, quiero que Tú me mires con la mirada con que miraste a María y a José. Para eso necesito ser humilde. Tus ojos se inclinan siempre hacia lo pequeño, lo pobre, lo sencillo, lo insignificante.

MIERCOLES

“ María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo. ”



san Mateo 1, 1-17 

Libro del origen de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán. Abrahán engendró a Isaac, Isaac engendró a Jacob, Jacob engendró a Judá y a sus hermanos. Judá engendró, de Tamar, a Farés y a Zará, Farés engendró a Esrón, Esrón engendró a Aran, Aran engendró a Aminadab, Aminadab engendró a Naasón, Naasón engendró a Salmón, Salmón engendró, de Rajab, a Booz; Booz engendró, de Rut, a Obed; Obed engendró a Jesé, Jesé engendró a David, el rey. 

“genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán”. Creo que es mejor no meterse a fondo con las interpretaciones que los exégetas hacen sobre el texto, con los diversos nombres que en él aparecen, con las tres generaciones de catorce, desde Abrahán hasta el Mesías pasando por David. Quedémonos con algunas verdades que se desprenden de esta genealogía.

David, de la mujer de Urías, engendró a Salomón, Salomón engendró a Roboán, Roboán engendró a Abías, Abías engendró a Asaf, Asaf engendró a Josafat, Josafat engendró a Jorán, Jorán engendró a Ozías, Ozías engendró a Joatán, Joatán engendró a Acaz, Acaz engendró a Ezequías, Ezequías engendró a Manasés, Manasés engendró a Amós, Amós engendró a Josías; Josías engendró a Jeconías y a sus hermanos, cuando el destierro de Babilonia. 


La primera es recordarnos que Jesucristo no es un personaje inventado, que no se sabe su origen. Tiene un origen preciso, es un personaje histórico. Es un judío de pura raza, “hijo de David, hijo de Abrahán”.

Después del destierro de Babilonia, Jeconías engendró a Salatiel, Salatiel engendró a Zorobabel, Zorobabel engendró a Abiud, Abiud engendró a Eliaquín, Eliaquín engendró a Azor, Azor engendró a Sadoc, Sadoc engendró a Aquín, Aquín engendró a Eliud, Eliud engendró a Eleazar, Eleazar engendró a Matán, Matán engendró a Jacob; y Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo. Así, las generaciones desde Abrahán a David fueron en total catorce; desde David hasta la deportación a Babilonia, catorce; y desde la deportación a Babilonia hasta el Cristo, catorce.

Aunque sabemos que es el Mesías, el Hijo de Dios, tiene una familia humana normal, algunos de sus miembros claramente pecadores. Se quiere destacar su procedencia humana y al final se habla cómo “Jacob engendró a José, el esposo de María, de la cual nació Jesús, llamado Cristo”.

Tú no te asustas del barro del que estamos hechos; más bien te sirves de él para comprender mejor nuestra fragilidad y perdonarnos. Te metes en nuestro fango para sacarnos de él. Tu eres realmente nuestro Salvador y Redentor. ¡Gracias, Señor!

MARTES

“ Hijo, ve hoy a trabajar a la viña ”



según san Mateo 21,28-32 

En aquel tiempo, dijo Jesús a los sumos sacerdotes y a los ancianos del pueblo: «¿Qué os parece? 

Un hombre tenía dos hijos. Se acercó al primero y le dijo: “Hijo, ve hoy a trabajar en la viña”. Él le contestó: “No quiero”. Pero después se arrepintió y fue.

En cambio acepta las obras del primero aunque sus palabras hayan sido de rechazo.

 Se acercó al segundo y le dijo lo mismo. Él le contestó: “Voy, señor”. Pero no fue. 

Jesús no acepta a estas personas de buenos modales, de exquisita reputación, de méritos acumulados y que se limitan a tener buenos discursos y bonitas palabras. “Por los frutos los conoceréis”. Por eso rechaza la respuesta perfecta del hijo segundo.

¿Quién de los dos cumplió la voluntad de su padre?». 

En nuestros esquemas mentales, que no difieren mucho de los de los contemporáneos de Jesús, no cabe otro orden que el establecido por las leyes o normas de una institución religiosa.

Contestaron: «El primero». 

Jesús les dijo: «En verdad os digo que los publicanos y las prostitutas van por delante de vosotros en el reino de Dios.

  Pues bien, Jesús se saltó todas esas instancias y mediaciones con su enseñanza y conducta. Lo que Jesús hizo con los proscritos, los marginados y los despreciados no nació de una ocurrencia irreverente. La conducta de Jesús fue fruto de su fe, de su especial relación con Dios como Padre. Es el Padre el que quiere “que todos los hombres se salven”.

Porque vino Juan a vosotros enseñándoos el camino de la justicia y no le creísteis; en cambio, los publicanos y prostitutas le creyeron. 

Y, aun después de ver esto, vosotros no os arrepentisteis ni le creísteis».

Le da igual que sean negros que blancos; judíos o extranjeros; sabios o ignorantes; hombres o mujeres; pecadores o justos. Es el Padre el que ama a todos porque le nace de dentro el amor y la misericordia.


Aceptas las obras del hijo que, en un momento, tiene contigo malos modales, malas contestaciones, pero después tiene buen corazón y cumple tu voluntad. Lo comprendes y lo perdonas. En este mundo nuestro, ¡sobran palabras! ¡faltan obras!


LUNES

“ Tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto ”


san Mateo 21, 23-27

Los fariseos y todos aquellos que habían sido perjudicados por la expulsión de los vendedores del Templo, se unen para poner a prueba a Jesús. Podrían tramar algo así: "A ese maestro tenemos que acusarle de blasfemo.

La chusma anda pregonando de él: que es "divino", que es hijo del Altísimo... o algo por el estilo. Entonces será más sencillo acusarle..."

 En aquel tiempo, Jesús llegó al templo y, mientras enseñaba, se le acercaron los sumos sacerdotes y los ancianos del pueblo para preguntarle: «¿Con qué autoridad haces esto? ¿Quién te ha dado semejante autoridad?». 

Jesús les replicó: «Os voy a hacer yo también una pregunta; si me la contestáis, os diré yo también con qué autoridad hago esto. 

Pero Jesús conoce sus pensamientos, sus intenciones torcidas y su mala fe. No responde, porque ellos tampoco tienen el valor de reconocer su pecado.

Cuando Jesús pregunta nunca lo hace sobre cosas superficiales

El bautismo de Juan ¿de dónde venía, del cielo o de los hombres?». Ellos se pusieron a deliberar: «Si decimos “del cielo”, nos dirá: “¿Por qué no le habéis creído?”. Si le decimos “de los hombres”, tememos a la gente; porque todos tienen a Juan por profeta». Y respondieron a Jesús: «No sabemos». Él, por su parte, les dijo: «Pues tampoco yo os digo con qué autoridad hago esto».



Las preguntas de Jesús van al fondo. Siempre nos pregunta cosas esenciales, que afectan existencialmente nuestra vida. Cada pregunta de Jesús nos hace pensar, nos saca de nuestras casillas, Y nos compromete.

 No cabe ni mirar a otro lado ni echar balones fuera. Hay que tener la valentía de decidirse. Como la tuvieron los zebedeos al decir a Jesús ¡Podemos! Podemos, siempre con tu ayuda

 DOMINGO

Seguimos en Adviento, que es la alegre espera del nacimiento de Jesús. Cuanto más cerca de nosotros está el Señor, mayor es la alegría. Pero con la Palabra que nos trae hoy su presencia, viene también la inquietud de buscarlo, esperarlo, y hacerlo presente. Este es nuestro reto en Adviento.


según san Mateo 11, 2-11 


“ Alegría sin límite en sus rostros ”

En aquel tiempo, Juan, que había oído en la cárcel las obras del Mesías, mandó a sus discípulos a preguntarle: «¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?». 

Juan el Bautista desde la cárcel oye hablar de las acciones del Mesías (Cristo) y manda a sus discípulos para preguntarle a Jesús: “¿Eres tú el que ha de venir o tenemos que esperar a otro?”.

Jesús les respondió: «Id a anunciar a Juan lo que estáis viendo y oyendo: los ciegos ven, y los cojos andan; los leprosos quedan limpios y los sordos oyen; los muertos resucitan y los pobres son evangelizados. ¡Y bienaventurado el que no se escandalice de mí!». 

Jesús no les responde a la pregunta, y les remite a los signos que le acompañan en su ministerio, signos que anuncian que el proyecto de Dios se está realizando según la profecía de Isaías 

Juan está perplejo, porque ha anunciado a un Mesías lleno de fuerza que habría de llevar el fuego por todas partes, y ahora oye hablar de Jesús que, al contrario de lo esperado, se manifiesta con actitudes de misericordia y bondad. Ni siquiera el Bautista es una excepción en la oscuridad de la fe, ni goza desde el principio de una plena comprensión del proyecto de Dios que le puede preservar del escándalo

Al irse ellos, Jesús se puso a hablar a la gente sobre Juan: «¿Qué salisteis a contemplar en el desierto, una caña sacudida por el viento? ¿O qué salisteis a ver, un hombre vestido con lujo?

 Mirad, los que visten con lujo habitan en los palacios. 

Entonces, ¿a qué salisteis?, ¿a ver a un profeta? Sí, os digo, y más que profeta. Este es de quien está escrito: “Yo envío mi mensajero delante de ti, el cual preparará tu camino ante ti”. En verdad os digo que no ha nacido de mujer uno más grande que Juan el Bautista; aunque el más pequeño en el reino de los cielos es más grande que él».

La respuesta de Jesús al Bautista todavía es válida para nosotros hoy: Jesús ya está llevando a cabo este cambio; nos da signos, pero debemos darles crédito, siguiéndole por el camino de debilidad que él ha elegido. 

El Reino de Dios llega sin ruido (será instaurado definitivamente sobre la cruz), pero sólo si creemos podremos experimentar su fuerza y también nosotros nos comprometeremos en el verdadero cambio del mundo.

JORNALITAS DIA 2

SEGUNDA JORNADA. 17 DE DICIEMBRE

 Esta es la segunda jornada, y es la ciudad de Naín, donde resucitó el Niño Dios al hijo de la viuda, en su crecida edad. Contempla en esta jornada los trabajos de Nuestra Reina y Señora experimentando las lluvias del cielo, los aires fríos, las penalidades del camino, a su santo esposo caminando a pie, y apartando el jumento de las veredas ásperas, limpiando los caminos pedregosos, cansado, hasta llegar a la ciudad. 

Donde puedes considerar en este Patriarca Santo, la vergüenza que pasaría en las puertas de los mesones, buscando posada para su fatigada esposa, las palabras ásperas y desabridas con que le despedían los mesoneros como gente interesada, el desconsuelo con que se quedaría en el rincón del portal, aumentando la pena de ambos esposos, el ver a Dios a las puertas de un mesón, sin dar entrada a la misma luz: y mira tú cuántas veces has hecho la mismo, despidiendo a Dios de tu corazón con el pecado, por tener tu alma hecha un mesón público de los demonios.



 Abre en este día las puertas de tu corazón, y oye qué te dice el vientre de su madre: mira, alma mía, en cuya busca vengo para llevarte a mi gloria, que estoy llamando a las puertas de tu corazón, ábreme que no tengo dónde reclinar la cabeza. 

 Iglesia Franciscana - Naín Unidos en Oración de Esperanza. Paz y Bien  

ANTIFONAS DE LA O

El miércoles comienza la segunda parte del Adviento, que ya mira a la Navidad. 

Son las ferias mayores de este tiempo, que corresponden a los ocho días previos a la solemnidad de la Natividad del Señor.



 En los primeros siete días, durante el rezo de las Vísperas, con el Magníficat se cantan o recitan las "antífonas mayores de adviento, también conocidas como “Antífonas de la O”. 

Las Antífonas de la O, que la Iglesia proclama del 17 al 23 de diciembre, son una de las expresiones más densas y bellas del Adviento. Comienzan con una exclamación que es clamor y deseo a la vez: “Oh”, un grito nacido de la espera de un pueblo que sabe que la historia no se salva sola. 

Se les conoce así porque todas empiezan en latín con la exclamación “O”, en castellano “Oh”. Fueron compuestas hacia los siglos VII-VIII, como un resumen de los deseos de salvación de toda la humanidad, como un compendio del espíritu del Adviento. 

En ellas, la comunidad creyente invoca a Cristo con títulos tomados de la Escritura y reconoce en Jesús el cumplimiento de todas las promesas de Dios. No se trata de ideas abstractas, sino de una confesión viva: Dios entra en la historia para conducirla, sanarla y llevarla a su plenitud. 

Cada antífona va desvelando el rostro de Cristo como Sabiduría que ordena el mundo con amor, como Señor de la historia que libera, como Luz que vence las tinieblas y como Emmanuel que habita entre nosotros. La Encarnación aparece así no como un hecho aislado, sino como la culminación de una larga espera, asumida por Dios con paciencia y fidelidad. 



En Jesús, Dios no se impone desde el poder, sino que se hace cercano, vulnerable y solidario con la fragilidad humana. 

Las Antífonas de la O educan el corazón en el deseo, enseñan a esperar activamente y a reconocer nuestra necesidad de salvación. 

Son oración del pueblo que sufre, de quienes anhelan justicia, sentido y paz, y no se resignan a que el mal tenga la última palabra. En su lenguaje simbólico y profundo, anuncian que Dios está cerca, que no ha olvidado su promesa. Incluso su mensaje oculto lo confirma: “mañana vendré”. En los últimos días de Adviento, estas antífonas nos colocan en el umbral del misterio y nos invitan a abrir la vida para que Dios nazca de nuevo en nuestra historia concreta.


Cada antífona empieza por una exclamación, “Oh”, seguida de un título mesiánico tomado del Antiguo Testamento:


 el 17, Sapientia (Sabiduría);




JOSE Y MARIA HAN LLEGADO A BELEN

 DE NAZAERT A  BELEN

El camino, en no muy buenas condiciones, lo harían en cuatro o cinco jornadas, con un borrico. q 

Un periplo 156 kilómetros que representó una auténtica prueba para la pareja.



Joseph Ratzinger, Benedicto XVI, en su libro, de 2018, Jesús de Nazaret, nos recuerda la frase evangélica: “Sucedió en aquellos días que salió un decreto del emperador Augusto, ordenando hacer un censo del mundo entero” (Lucas 2, 1). Y dice Benedicto XVI “con estas palabras introduce Lucas su relato del nacimiento de Jesús y explica cómo es que tuvo lugar en Belén.

Dios se sirvió de este decreto del emperador romano para que María y José se encaminaran a Belén y allí naciera el Mesías, como había sido anunciado por los profetas.

Pasan por lugares conocidos por los Evangelios; Monte Tabor, Naif, el Pozo de Sique 



y por supuesto Jerusalén y por fin llegan a Belén.





Llegaron nuestros peregrinos sagrados a las cuatro de la tarde, cuando pensaba el Santo Patriarca hallar segura posada para la Madre de Dios, entre sus deudos, parientes y conocidos, poniendo fin y término a sus trabajos; entonces se le multiplicaron las penas, porque habiendo cumplido con el edicto del César, llegaron a las puertas de los parientes a buscar posada y todos les dieron con ella en la cara.

Consideremos que tristeza padecería su atribulado corazón en aquellas calles buscando en las puertas de los mesones un portal o pajar para la Emperatriz de los cielos. 



La mortificación que padecería con las palabras ásperas y desabridas con que los despedían, tratando al santo esposo de ocioso y vagabundo, al verla con tanta humildad y pobreza: ¡Qué lágrimas no derramarían sus ojos! 

Miraba a su santísima esposa desamparada y llorosa con el desprecio de los hombres.



Por fin una posada pero.....sin habitaciones.

Les ofrecen una humilde cueva y pesebre de animales, donde puedes considerar, cómo habiendo llegado los peregrinos sagrados dan gracias al Eterno Padre, por aquel humilde y despreciado hospicio.


Y cuantas veces tu y yo nos hemos  olvidado de Ella y de su Divino Niño.

VEN, SEÑOR JESUS

A que esperamos .......................viene el Señor y malo será que nos encuentre despistado y con los caminos de nuestro corazón torcidos o mal preparados.
Amen

domingo, 14 de diciembre de 2025

ESTAR ALEGRE EN ADVIENTO



Entre otras cosas, porque sé, Señor que Tú llegas por mí y para mí. Porque ves el vacío que existe en el hombre si Tú no estás dentro. Porque soy consciente, Señor, de que la llegada de un amigo altera la vida de una familia el orden al que estamos acostumbrados

 ¿POR QUÉ TENGO QUE ESTAR ALEGRE?



Porque, ante las calamidades, Señor
no es bueno acobardarse
no es sensato reprimirse
no es cristiano acomplejarse:
hay que sonreír, incluso, en la aflicción
Porque al final de la oscuridad brillas Tú, Señor
Porque en los problemas socorre tu mano, Señor
Porque en las dudas, envías certezas
Porque en la soledad, eres eterna compañía
Porque vienes, y si vienes, es para estar conmigo
¿POR QUÉ TENGO QUE ESTAR ALEGRE?


Porque, sin alegría, algo faltará en mi corazón
Porque, sin alegría, puede que pases de largo, Señor,
Porque, sin alegría, la vida no es vida
Porque, sin alegría, falta la luz a cada uno de mis días
Porque, sin alegría, ¿puedo acogerte en mi casa, Señor?
Simplemente porque al tenerte, Señor,
no siento otra cosa en mí sino la ALEGRÍA
Tú, Señor, tu Nacimiento y tu llegada
es la causa de mi gozo,
la música de mi alma
la alegría de mi cara el secreto de la Navidad.




¡Gracias, Señor! ¡Tú eres la causa de mi felicidad!
Javier Leoz Ventura




SAN JUAN DE LA CRUZ

 14 DICIEMBRE: SAN JUAN DE LA CRUZ, PRESBÍTERO Y DOCTOR DE LA IGLESIA 

 Memoria de san Juan de la Cruz, presbítero de la Orden de los Carmelitas y doctor de la Iglesia, el cual, por consejo de santa Teresa, fue el primero de los hermanos que emprendió la reforma de la Orden, empeño que sostuvo con muchos trabajos, obras y ásperas tribulaciones, y, como demuestran sus escritos, buscando una vida escondida en Cristo y quemado por la llama de su amor, subió al monte de Dios por la noche oscura, descansando finalmente en el Señor, en Úbeda, de la provincia de Jaén (1591).








Fecha de beatificación: 25 de enero de 1675 por el Papa Clemente X 

Fecha de canonización: 27 de diciembre de 1726 por el Papa Benedicto XIII 

Etimológicamente: Juan = Dios es misericordioso, es de origen hebreo.

BIOGRAFIA

 Ávila y concretamente Fontiveros fue su patria chica. Luego lo será Castilla y de modo principal Andalucía la tierra de sus amores. Se llamó Juan Yepes. 

Nació en 1542 del matrimonio que formaban Gonzalo y Catalina; eran pañeros y vivían pobres. Su padre muere pronto y la viuda se ve obligada a grandes esfuerzos para sacar adelante a sus tres hijos: Francisco, Luis y Juan. Fue inevitable el éxodo cuando se vio que no llegaba la esperada ayuda de los parientes toledanos; Catalina y sus tres hijos marcharon primero a Arévalo y luego a Medina del Campo que es el centro comercial de Castilla. Allí malviven con muchos problemas económicos, arrimando todos el hombro; pero a Juan no le van las manualidades y muestra afición al estudio. 

Relicario de San Juan de la Cruz en Úbeda, con una pequeña parte del cuerpo.


Entra en el Colegio de la Doctrina, siendo acólito de las Agustinas de la Magdalena, donde le conoció don Alonso Álvarez de Toledo quien lo colocó en el hospital de la Concepción y le costea los estudios para sacerdote. Los jesuitas fundan en 1551 su colegio y allí estudió Humanidades. Se distinguió como un discípulo agudo.



 Juan eligió la Orden del Carmen; tomó su hábito en 1563 y desde entonces se llamó Juan de Santo Matía; estudia Artes y Teología en la universidad de Salamanca como alumno del colegio que su Orden tiene en la ciudad. El esplendor del claustro es notorio: Mancio, Guevara, Gallo, Luis de León enseñan en ese momento. 

En 1567 lo ordenaron sacerdote. Entonces tiene lugar el encuentro fortuito con la madre Teresa en las casas de Blas Medina. Ella ha venido a fundar su segundo "palomarcico", como le gustaba de llamar a sus conventos carmelitas reformados; trae también con ella facultades del General para fundar dos monasterios de frailes reformados y llegó a convencer a Juan para unirlo a la reforma que intentaba salvar el espíritu del Carmelo amenazado por los hombres y por los tiempos. Llegó a exclamar con gozo Teresa ante sus monjas que para empezar la reforma de los frailes ya contaba con "fraile y medio" haciendo con gracia referencia a la corta estatura de Juan; el otro fraile, o fraile entero, era el prior de los carmelitas de Medina, fray Antonio de Heredia. 



Inicia su vida de carmelita descalzo en Duruelo y ahora cambia de nombre, adoptando el de Juan de la Cruz. Pasa año y medio de austeridad, alegría, oración y silencio en casa pobre entre las encinas. Luego, la expansión es inevitable; reclaman su presencia en Mancera, Pastrana y el colegio de estudios de Alcalá; ha comenzado la siembra del espíritu carmelitano. 



La monja Teresa quiere y busca confesores doctos para sus monjas; ahora dispone de confesores descalzos que entienden -porque lo viven- el mismo espíritu. Por cinco años es Juan el confesor del convento de la Encarnación de Ávila. La confianza que la reformadora tiene en el reformador -aunque posiblemente no llegó a conocer toda la hondura de su alma- se verá de manifiesto en las expresiones que emplea para referirse a él; le llamará "senequita" para referirse a su ciencia, "santico de fray Juan" al hablar de su santidad, previendo que "sus huesecicos harán milagros".

 No podía faltar la cruz; llegó del costado que menos cabía esperarla. Fueron los hermanos calzados los que lo tomaron preso, lo llevan preso a Toledo donde vivió nueve meses de durísima prisión. Es la hora de Getsemaní, la noche del alma, un periodo de madurez espiritual del hombre de Dios expresado en sus poemas. Logra escapar en 1578 del encierro de forma dramática, poniendo audacia y ganando confianza en Dios, con una cuerdecilla hecha con pedazos de su hábito y saliendo por el tragaluz. 



En los oficios de dirección siempre aparece Juan de la Cruz como un segundón; serán los padres Gracián y Doria quienes se encarguen de la organización, Juan llevará la doctrina y cuidará del espíritu.

 Se le ve presente en la serranía de Jaén, confesor de las monjas en Beas de Segura, donde se encuentra la religiosa Ana de Jesús. Después en Baeza; funda el colegio para la formación intelectual de sus frailes junto a la principal universidad andaluza. Y en Granada, en el convento de los Mártires, continuará su trabajo de escritor. En 1586 funda los descalzos de Córdoba, como los de Mancha Real. 

Consiliario del padre Doria, en Segovia, por tres años. ¡Cómo no recordar su deseo-exponente de amor rendido- ante la contemplación de un Cristo doliente! "Padecer, Señor, y ser menospreciado por Vos".



 En 1591 la presencia de fray Juan de la Cruz empieza a ser non grata ante el padre Doria. La realidad es que está quedando arrinconado y hasta llega a tramarse su expulsión del Carmelo. 

Marcha a la serranía de Jaén, en la Peñuela, para no estorbar y se plantea la posibilidad de marchar a las Indias; allí estará más lejos. Es otro tiempo de oración solitaria y sabrosa. La reforma carmelitana vive agitada por el modo de proceder de Doria; a Juan le toca orar, sufrir y callar. Quizá tenga Dios otros planes sobre él y está preparándolo para una etapa mejor. 



Aquella inapetencia tan grande provocada por las calenturas persistentes provocó un mimo de Dios haciendo que aparecieran espárragos cuando no era su tiempo para calmar el antojadizo deseo de aquel fraile que iba de camino, sin fuerzas y medio muerto de cansancio, buscando un médico. 

Pasó dos meses en Úbeda. No acertó el galeno. Se presentó la erisipela en una pierna; luego vino la septicemia. Y en medio andaban los frailes con frialdad y era notoria la falta de consideración por parte del superior de la casa. Hasta que llegó el 13 de diciembre, cuando era de noche, que marchó al cielo desde el "estercolero del desprecio". Llovía. 



Al final de este resumen-recuerdo de un fraile místico que supo y quiso aprovechar el mal para sacar bien, el desprecio de los hombres para hacerse más apreciado de Dios, y el mismo lenguaje para expresar lo inefable de la misteriosa intimidad con Dios con lírica palabra estremecida, pienso que será buen momento para hacer mención de algunas de las obras que le han hecho figura de la cultura hispana del siglo XVI. Subida al Monte Carmelo y Noche oscura del alma que bien pueden considerarse tanto una obra como dos; el Cántico espiritual, Llama de amor viva y algunos poemas y avisos. Pío XI lo hizo doctor de la Iglesia en 1926. Su gran conocedor y admirador San Juan Pablo II, lo nombró patrono de los poetas.



ANUNCIACIÓN A LOS PASTORES

Los hombres no eran conscientes de quien había  nacido, pero unos ángeles que lo observaban todo , fueron a llevar la buenas noticias a un grupo de pastores que en las montañas vigilaban sus ovejas durante la noche.



Y la celebración del Cielo  bajó a la tierra cuando un grupo de ángeles cantaban juntos....


Mientras un angel decía pastores



.......Os ha nacido el Salvador, el Mesias.....



Los pastores decidieron que al amanecer el día irían a ver con sus propios ojos al Salvador





sábado, 13 de diciembre de 2025

DOMINGO DE LA ALEGRIA, GAUDETE

 GAUDETE..............EL SEÑOR ESTÁ CERCA 

El rosa, un color que solo se utiliza dos veces al año y que expresa alegria por acercamiento a la fiesta.




La liturgia del Tercer Domingo de Adviento está sembrada de llamadas a la alegría. Por eso, en la tradición litúrgica de la Iglesia se ha conocido éste como el Domingo de "Gaudete!", según el mensaje de la carta a los Filipenses (4,4-5) que introduce la celebración y, asimismo, es el texto de la segunda lectura del día, diciéndonos que el Señor esta cerca. 

Alégrense siempre en el Señor. Vuelvo a insistir, alégrense, pues el Señor está cerca.

Ya no solamente se nos invita a prepararnos a la Navidad mediante un cambio de vida y de mentalidad; sino que se nos invita a prepararnos con “alegría” porque el Salvador está cerca. 

La liturgia es expresiva. Este domingo Tercero de Adviento nos envuelve en el proceso de las condiciones de la verdadera alegría.

 El Adviento tiene mucha razón al proclamar este mensaje que es más necesario que nunca. Bajemos de todos los pedestales y de todas las petulancias para reconocer el valor de nuestros límites. En el fondo, es una cosa bien concreta: dejemos de vivir por encima de nuestras posibilidades, porque así no es posible la verdadera alegría.



Cristo viene como aquél que guía a una Humanidad dispersa, cansada y sin esperanza y la toma de la mano para llevarla de vuelta a Dios. Jesús el Mesías es la cabeza de los redimidos, sobre el camino santo de la obediencia y de la fidelidad. Pero éste retorno, debe explicitarse en el curso de las generaciones. La liberación exige tiempo y trabajo.



ORACION DE LA MAÑANA DE ADVIENTO


2º DE ADVIENTO CONVIÉRTEME, SEÑOR 

Del ruido, que me impide escucharte, a la paz que me permite sentirte con nitidez. De la comodidad, que desfigura mi felicidad a la sobriedad que necesita mi alma para no perderte a la belleza interior como camino hacia la perfección 

CONVIÉRTEME, SEÑOR 

De mi voz, suave y tímida para pregonarte, a un testimonio vivo ,eficaz y valiente, para proclamar que, como Tú, nada ni nadie ha de salvar al hombre 

CONVIÉRTEME, SEÑOR De mi autosuficiencia, orgullo y seguridades a la humildad para saber y poder encontrarte 

CONVIÉRTEME, SEÑOR De mis apariencias, simples e interesadas, a la plenitud que me ofrece tu presencia, real y misteriosa, dulce y exigente, divina y humana, audible….y a veces silenciosa Con respuestas….y a veces con interrogantes 

CONVIÉRTEME, SEÑOR Y dame un nuevo corazón para alabarte Y dame un nuevo corazón para bendecirte Y dame un nuevo corazón para esperarte Y dame un nuevo corazón para amarte. Amén.

D

Es el momento de acoger a un Dios Padre que busca hacer de la humanidad una familia más justa y fraterna. Movido por esta convicción, Jesús deja el desierto y marcha a Galilea a vivir de cerca los problemas y sufrimiento de la gente. Es ahí, en medio de la vida, donde se le tiene que sentir a Dios como “alguien bueno”: un Padre que atrae a todos a vivir una vida más humana.

L

El pecado no fue el comer una manzana. El pecado fue que Adán quiso comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, es decir, el árbol prohibido por Dios. Sólo Dios conoce el misterio del bien y del mal. Ellos no aceptaron su rol de criaturas, y quisieron ser como Dios. Dijeron NO A DIOS.

M

Con la confianza de un niño ante su papá, a quien considera muy cercano, te pido docilidad para escuchar tu palabra y seguirla como una dócil oveja sigue a su pastor. Jesús, concédeme el don de buscar -con la sencillez y la nobleza de un niño- el amor, el cariño y la ternura de un Dios que ya está llegando en Navidad.

X

Muchas veces nos aferramos a algo o alguien, que nos paraliza, suelta el pasado, déjalo atrás, Dios ordenó a Abraham dejar su tierra y parentela, José tuvo que salir, Jacob, Ester, los discípulos, el apóstol Pablo, y ¿ cuántos más? tuvieron que dejar atrás y ¿tú que tienes que dejar? 

 Lleva tu carga a los pies de Jesús y Él te hará descansar, el te asegura su yugo que es fácil y ligera su carga, Él quiere que cojamos el de Él que es manso y humilde de corazón.
J
Y Juan tiene la valentía de decírselo. Por eso es encarcelado. Él sí que está en la cárcel, pero a la verdad no se le puede encarcelar. En la cárcel le cortarán la cabeza, pero esa cabeza en la bandeja seguirá hablando por los siglos.
V

Señor, mira mi debilidad, mira que tantas veces me comporto como un niño caprichoso que quiere manejar la situación desde mi comodidad. Dame la gracia de abrir mi corazón al amor, tu Amor, para que ahora y siempre pueda recorrer el camino que conduce hacia Ti.

Abre tu corazón, tu mente, tu voluntad a Cristo para que él pueda nacer y vivir en ti: Verás qué distinta es la vida desde su amor y amistad. Experimentaras grandes cosas.

S

Señor  que yo vea como Santa Lucia con los ojos del espíritu.




QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR 

Preparado para que, cuando Tú llames, yo te abra Despierto para que, cuando Tú te acerques, te deje entrar Alegre para que, cuando Tú te presentes, veas mi alegría 

QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR Que, el tiempo en el que vivo, no me impida ver el futuro Que, mis sueños humanos, no eclipsen los divinos Que, las cosas efímeras, no se antepongan sobre las definitivas QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR Y que, cuando nazcas, yo pueda velarte Para que, cuando vengas, salga a recibirte Y que, cuando llores, yo te pueda arrullar 

QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR Para que, la violencia, de lugar a la paz Para que los enemigos se den la mano Para que la oscuridad sea vencida por la luz Para que el cielo se abra sobre la tierra 

QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR Porque el mundo necesita ánimo y levantar su cabeza Porque el mundo, sin Ti, está cada vez más frío Porque el mundo, sin Ti, es un caos sin esperanza Porque el mundo, sin Ti, vive y camina desorientado 

QUIERO ESTAR EN VELA, SEÑOR Prepara mi vida personal: que sea la tierra donde crezcas Trabaja mi corazón: que sea la cuna donde nazcas Ilumina mis caminos: para que pueda ir por ellos y encontrarte Dame fuerza: para que pueda ofrecer al mundo lo que tu me das Quiero estar, en vela, Señor Entre otras cosas porque, tu Nacimiento, será la mejor noticia de la Noche Santa que se hará madrugada de amor inmenso en Belén. ¡VEN, SEÑOR! 



2º DE ADVIENTO CONVIÉRTEME, SEÑOR 

Del ruido, que me impide escucharte, a la paz que me permite sentirte con nitidez. De la comodidad, que desfigura mi felicidad a la sobriedad que necesita mi alma para no perderte a la belleza interior como camino hacia la perfección 

CONVIÉRTEME, SEÑOR 

De mi voz, suave y tímida para pregonarte, a un testimonio vivo ,eficaz y valiente, para proclamar que, como Tú, nada ni nadie ha de salvar al hombre 

CONVIÉRTEME, SEÑOR De mi autosuficiencia, orgullo y seguridades a la humildad para saber y poder encontrarte 

CONVIÉRTEME, SEÑOR De mis apariencias, simples e interesadas, a la plenitud que me ofrece tu presencia, real y misteriosa, dulce y exigente, divina y humana, audible….y a veces silenciosa Con respuestas….y a veces con interrogantes 

CONVIÉRTEME, SEÑOR Y dame un nuevo corazón para alabarte Y dame un nuevo corazón para bendecirte Y dame un nuevo corazón para esperarte Y dame un nuevo corazón para amarte. Amén.

D

Es el momento de acoger a un Dios Padre que busca hacer de la humanidad una familia más justa y fraterna. Movido por esta convicción, Jesús deja el desierto y marcha a Galilea a vivir de cerca los problemas y sufrimiento de la gente. Es ahí, en medio de la vida, donde se le tiene que sentir a Dios como “alguien bueno”: un Padre que atrae a todos a vivir una vida más humana.

L

El pecado no fue el comer una manzana. El pecado fue que Adán quiso comer del árbol de la ciencia del bien y del mal, es decir, el árbol prohibido por Dios. Sólo Dios conoce el misterio del bien y del mal. Ellos no aceptaron su rol de criaturas, y quisieron ser como Dios. Dijeron NO A DIOS.

M

Con la confianza de un niño ante su papá, a quien considera muy cercano, te pido docilidad para escuchar tu palabra y seguirla como una dócil oveja sigue a su pastor. Jesús, concédeme el don de buscar -con la sencillez y la nobleza de un niño- el amor, el cariño y la ternura de un Dios que ya está llegando en Navidad.

X

Muchas veces nos aferramos a algo o alguien, que nos paraliza, suelta el pasado, déjalo atrás, Dios ordenó a Abraham dejar su tierra y parentela, José tuvo que salir, Jacob, Ester, los discípulos, el apóstol Pablo, y ¿ cuántos más? tuvieron que dejar atrás y ¿tú que tienes que dejar? 

 Lleva tu carga a los pies de Jesús y Él te hará descansar, el te asegura su yugo que es fácil y ligera su carga, Él quiere que cojamos el de Él que es manso y humilde de corazón.
J
Y Juan tiene la valentía de decírselo. Por eso es encarcelado. Él sí que está en la cárcel, pero a la verdad no se le puede encarcelar. En la cárcel le cortarán la cabeza, pero esa cabeza en la bandeja seguirá hablando por los siglos.
V

Señor, mira mi debilidad, mira que tantas veces me comporto como un niño caprichoso que quiere manejar la situación desde mi comodidad. Dame la gracia de abrir mi corazón al amor, tu Amor, para que ahora y siempre pueda recorrer el camino que conduce hacia Ti.

Abre tu corazón, tu mente, tu voluntad a Cristo para que él pueda nacer y vivir en ti: Verás qué distinta es la vida desde su amor y amistad. Experimentaras grandes cosas.

S

Que vea Señor con los ojos del tu Espiritu como santa Lucia.

ANIVERSARIO EPISCOPAL DEL PAPA LEON XIV

 


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La Iglesia celebra hoy un aniversario particularmente significativo en la vida del Papa León XIV: se cumplen 11 años desde su ordenación episcopal, recibida el 12 de diciembre de 2014 en la Catedral de Santa María de Chiclayo (Perú), en plena festividad de Nuestra Señora de Guadalupe. 

La ceremonia fue presidida en aquel entonces por el legado pontificio en el país, y marcó el inicio del ministerio episcopal del entonces Robert Francis Prevost, quien ya servía en el Perú desde hacía varios años.

 Ese día asumió el lema que lo ha acompañado desde entonces: “In Illo uno unum” (“En el Uno, uno solo”), una expresión tomada de san Agustín que inspira su visión de comunión y unidad en la Iglesia. Tras su ordenación, Prevost ejerció como Obispo de Chiclayo y desempeñó responsabilidades destacadas en la pastoral nacional, antes de ser convocado por el Papa Francisco al Vaticano, donde más tarde sería creado cardenal. 

Su camino pastoral, marcado por la cercanía con los pobres y por su larga experiencia misionera, desembocó finalmente en su elección como Papa León XIV en mayo de 2025. 




En este nuevo aniversario, el Pontífice lo celebra en el contexto de la fiesta de la Virgen de Guadalupe, cuya luz maternal ha acompañado desde el inicio su misión como pastor de la Iglesia.