Festividad litúrgica que recuerda el traslado de los restos del Apóstol Santiago, después de su martirio en Jerusalén, hasta el occidente de la Península Ibérica, para ser sepultados.
Durante la celebración tiene lugar la tradional Ofrenda Nacional.
Desarrollo de la ceremonia
A las 11.30 h. el Excmo. Cabildo recibe en la puerta de Azabachería al Excmo. Sr. Arzobispo y le acompaña, haciendo una breve parada ante el altar mayor, donde el Excmo. Sr. Arzobispo se arrodilla y ora brevemente; a continuación, por la nave de Platerías el cortejo se encamina hacia el Claustro y la Sala Capitular para revestirse.
Igualmente a las 11.30 h. sale del edificio del Concello la comitiva de Autoridades que acompañan a la Excma. Delegada Regia.
Una Comisión Capitular recibe a la Excma. Sra. Delegada Regia y a las Autoridades que le acompañan en el Pórtico de la Gloria y se dirigen, por la nave central, hacia la Puerta del Tesoro, donde aguardan el inicio de la Procesión.
Se dispone la procesión en el Claustro de la Catedral, con un orden establecido.
A las 11.40 h. se inicia la procesión.
Cuando el Excmo. Sr. Arzobispo sale por la puerta del Tesoro a la nave de la Catedral, saluda a las autoridades que, acompañados por la Comisión Capitular, se incorporan entonces al Cortejo Litúrgico para la procesión por las naves de la Catedral, siguiendo a los portadores que llevan la imagen del Apóstol Santiago.
En la nave Azabachería, se detiene el cortejo mientras suenan las chirimías y funciona el Botafumeiro.
Al terminar, la procesión se reanuda por el pasillo izquierdo de la nave central y se encamina hacia el Pórtico de la Gloria.
Llegados allí, se detiene el cortejo y los portadores de la Imagen se giran hacia el Excmo. Sr. Arzobispo, para escuchar el “motete” en honor del Apóstol Santiago, cantado por el coro en la tribuna.
Finalizado el motete, se entona el “Gloria Patri”, y suena el órgano, mientras la procesión se encamina de nuevo hacia el Altar Mayor para comenzar la Misa Estacional.
Al llegar a la altura del transepto, los portadores de la imagen del Apóstol se sitúan a un lado, mientras los componentes de la procesión van pasando de dos en dos ante ella y le hacen reverencia, dirigiéndose luego hacia el altar. Hecha la genuflexión antes de subir las gradas del presbiterio, besan el altar y se dirigen a los lugares que tienen reservados en el presbiterio o en los laterales del transepto.
Las autoridades y la Delegada Regia, acompañados por la Comisión Capitular, ocupan los lugares preparados para ellos.
Cuando el Excmo. Sr. Arzobispo se sitúa en el centro delante del altar se continúa con la MISA ESTACIONAL EN LA TRASLACIÓN
http://www.archicompostela.es/monsenor-barrio-pide-no-tener-miedo-a-ser-y-a-aparecer-como-cristianos-en-la-vida-privada-y-en-la-publica
Entradas
No hay comentarios:
Publicar un comentario