El besapiés ha terminado y antes de dejar la iglesia los vecinos de Siruela pasan ante la cruz.
El llamador en silencio hasta el año que viene.
Nuestra querida Dolorosa a la espera de que su Hijo venza a la muerte.
Y nuestro Cristo del Sepulcro de vuelta a su urna del pequeño altar.
Primero le quitan el tul y envuelto, otra vez, en el paño blanco
es llevado por los nazarenos a su urna.
para llevarlo a su urna donde a lo largo de todo el año muchos devotos se acercan para
rezar ante el.
Gracias por tanto Amor Señor.
El presidente vuelve a cerrar la urna con llave.
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