YA ES SEMANA SANTA

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martes, 25 de junio de 2024

DOMINGO XII DEL TIEMPO ORDINARIO

 MIÉRCOLES

“ Cuidado con los profetas falsos ”



según san Mateo 7,15-20 


En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuidado con los profetas falsos; se acercan con piel de oveja, pero por dentro son lobos rapaces. 

Según este evangelio las personas pueden ser: personas-oveja y personas-lobo. Pero es importante que sepamos distinguirlos. ¿Cómo? Sólo por las obras. La persona-lobo, aunque se disfrace de oveja, es violenta, agresiva, crea conflictos, disensiones, divisiones, enfrentamientos.

Por sus frutos los conoceréis. ¿Acaso se cosechan uvas de las zarzas o higos de los cardos?

 Así, todo árbol sano da frutos buenos; pero el árbol dañado da frutos malos. 

En cambio, la persona-oveja es tolerante, dulce, amable, comprensiva, servicial. La persona-lobo ahuyenta, separa, da miedo. La persona-oveja atrae, cautiva, siembra armonía, alegría y paz.

Un árbol sano no puede dar frutos malos, ni un árbol dañado dar frutos buenos. El árbol que no da fruto bueno se tala y se echa al fuego. Es decir, que por sus frutos los conoceréis».

Las personas-lobo, siembran el mundo de maldad, de destrucción y de muerte. Las personas-oveja, siembran el mundo de bien, de esperanza y de vida.

El evangelio de hoy nos llama a la autenticidad, a no vivir de fachada. Siempre debemos tener presentes las palabras del Señor a la Iglesia de Sardes: “Conozco tus obras: Tienes nombre como de quien vive, pero estás muerto”. Y siempre estamos muertos si no vivimos del amor.


MARTES

“ ¡Qué estrecha es la puerta que lleva a la vida! ”

El evangelio de hoy nos habla de una “puerta estrecha”. En realidad para un cristiano no puede haber otra puerta que no sea Jesús. “Él es la puerta” (Jn. 10,7). Y la puerta de Jesús no puede ser otra que “la puerta del amor”.

según san Mateo 7,6.12-14

 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No deis lo santo a los perros, ni les echéis vuestras perlas a los cerdos; no sea que las pisoteen con sus patas y después se revuelvan para destrozaros. Así, pues, todo lo que deseáis que los demás hagan con vosotros, hacedlo vosotros con ellos; pues esta es la Ley y los Profetas. 

Por esa puerta Jesús nos abre el acceso a un Padre maravilloso, lleno de cariño y de ternura. Y por esa misma puerta Jesús nos abre el acceso “al hombre”.

Entrad por la puerta estrecha. Porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos entran por ellos.

La puerta del amor no puede ser ancha porque se cuela el egoísmo por dentro y destruye al verdadero amor. La puerta del amor es estrecha porque está hecha de sacrificio. Jesús pasó por la puerta estrecha de la Cruz, y así nos expresó con toda claridad todo lo que nos quería.

 ¡Qué estrecha es la puerta y qué angosto el camino que lleva a la vida! Y pocos dan con ellos».

Pero para un cristiano la meta es más alta: el cristiano pone en el centro a Jesús. Hacer lo que hizo Jesús, pensar como pensaba Jesús, y amar como Él amó. Sólo este amor nos realiza como personas. Sólo este amor nos hace plenamente felices. “Y sabiendo como sabéis estas cosas, seréis felices si las cumplís” (Jn. 13,17). 

El saber cosas bonitas sobre el amor no nos hace felices. Pero sí nos hace felices el ponerlo en práctica como Jesús. Bendita “puerta estrecha” que nos lleva a la auténtica y verdadera felicidad.

LUNES

“ Se va a llamar Juan ”



según san Lucas 1, 57-66. 80 

A Isabel se le cumplió el tiempo del parto y dio a luz un hijo. Se enteraron sus vecinos y parientes de que el Señor le había hecho una gran misericordia, y se alegraban con ella. 

A los ocho días vinieron a circuncidar al niño, y querían llamarlo Zacarías, como su padre; pero la madre intervino diciendo: «¡ No! Se va a llamar Juan». 

Y le dijeron: «Ninguno de tus parientes se llama así». Entonces preguntaban por señas al padre cómo quería que se llamase.

 Él pidió una tablilla y escribió: «Juan es su nombre» Y todos se quedaron maravillados. Inmediatamente se le soltó la boca y la lengua, y empezó a hablar bendiciendo a Dios. 

Los vecinos quedaron sobrecogidos, y se comentaban todos estos hechos por toda la montaña de Judea. Y todos los que los oían reflexionaban diciendo: «Pues ¿qué será este niño?». Porque la mano del Señor estaba con él. 

El niño crecía y se fortalecía en el espíritu, y vivía en lugares desiertos hasta los días de su manifestación a Israel.


Señor, te confieso que me fascina la figura de Juan y te pido que sepa imitarle en su humildad: “es la voz de otro”. Está llamado a señalar a otro que viene detrás y es más que él. Haz que el importante de mi vida no sea yo, sino que seas Tú. Que yo sólo viva para anunciarte con mis palabras y, sobre todo, con el testimonio de mi vida.

DOMINGO

“ ¿Aún no tenéis fe? ”

En la lectura evangélica que contemplamos hoy (Mc 4, 35-41) comienza la narración de una serie de cuatro milagros de Jesús en presencia de sus discípulos, con exclusión de la muchedumbre que le seguía a todas partes. Jesús quiere demostrarles que el Reino a que se refería en las parábolas ya ha llegado, que está entre nosotros.

según San Marcos 4, 35-41 

En este primer milagro vemos a Jesús ejerciendo poder sobre los elementos, específicamente sobre el viento y el mar.

Aquel día, al atardecer, dijo Jesús a sus discípulos: «Vamos a la otra orilla». 

Dejando a la gente, se lo llevaron en barca, como estaba; otras barcas lo acompañaban. 

Quiere estar a solas con ellos, pero a la vez quiere demostrarles lo difícil que ha de ser su trabajo, y la importancia de permanecer constantes en la fe, aún en medio de las dificultades.

 Abandonan Galilea y se dirigen a tierra de paganos, lugar donde aún no se ha escuchado la palabra de Dios; verdadero “territorio de misión”. 

Se levantó una fuerte tempestad y las olas rompían contra la barca hasta casi llenarla de agua. 

Él estaba en la popa, dormido sobre su cabezal. Lo despertaron, diciéndole: «Maestro, ¿no te importa que perezcamos?».

 Se puso en pie, increpó al viento y dijo al mar: «¡Silencio, enmudece!». 

El viento cesó y vino una gran calma. Él les dijo: «¿Por qué tenéis miedo? ¿Aún no tenéis fe?».

 Se llenaron de miedo y se decían unos a otros: «¿Pero quién es este? ¡Hasta el viento y el mar le obedecen!».


lunes, 24 de junio de 2024

MES DEL CORAZON DE JESÚS DIA 19, 20, 21, 22, 23, 24

 ORACIÓN

ME HACES BUENO CUANDO ME DEJO AMAR POR TI.


Oración de entrada del Padre Javier Loez
Vuelve tus ojos de amigo y de hermano e infunde en nosotros sentimientos de paz, de fraternidad, de fortaleza y de justicia todo ello, Señor, son y las necesitamos como semillas divinas

Bendice, Corazón de Jesús, a los que te buscan y se dan de bruces con el muro del escepticismo a los que dudan y se quedan encarcelados en sus propias incertidumbres a los que lloran y se ahogan en el mar de propias lágrimas a los que sufren y caen bajo el peso del madero de sus propias cruces,

24. - ACCIONES ÚTILES

¿Cuáles han sido los dos grandes deseos del Corazón de Jesús? La gloria del Padre y la salvación de las almas. Por la gloria del Padre, Jesús, con doce años, se encuentra con los doctores del templo; por su gloria recorre toda Palestina, bendiciendo y curando, y cuando llega la hora del suplicio, alza los ojos al cielo y reza: "Padre, yo te he glorificado en la Tierra donde he cumplido la obra que me has confiado.


Padre, yo he manifestado tu Nombre a los hombres que me has dado. Santifícalos en la verdad. Con estas pocas palabras, Jesús explica su gran misión: Darle mayor gloria al eterno Padre y salvar las almas perdidas." Proponte ofrecer cada día al Señor tus acciones y hacerlas con el único fin de darle gloria, de agradarle.


Devoción al Sagrado Corazón de Jesús


   Oración final, P.J.Loez
 Miranos Amigo y Señor y no dejes de mirarnos, contigo podemos caminar seguros y hacer frente con la fe en tu presencia a las dificultades de nuestra vida. Que tu Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.

23.-FRENTE A TANTO MAL

Cuando San Juan Bautista desde la prisión envió a dos de sus discípulos a Jesús para pedirle si era verdaderamente el redentor prometido. Jesús, por toda respuesta se refirió a los frutos: "Id y referid a Juan que los ciegos ven, los cojos andan, los muertos resucitan, los pobres son evangelizados". Jesús quiere nuestra salvación.

Él vive y obra por nosotros; por nosotros muere en la cruz. Siembra mucho, siembra a manos llenas el bien; no se perderá en la tierra; fructificará siempre para el cielo. ¡Cuántos defectos en las personas que tú conoces, que tú quieres! ¡Cuántas malas inclinaciones y quizá cuántos escándalos! Tú sabes que la caridad cristiana obliga a todos a la corrección fraterna.





   Oración final, P.J.Loez
 Miranos Amigo y Señor y no dejes de mirarnos, contigo podemos caminar seguros y hacer frente con la fe en tu presencia a las dificultades de nuestra vida. Que tu Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.


22.-LA PERSECUCIÓN

Quien más pesada, quien más ligera, todos tenemos una cruz personal que llevar, pero no hay una común a todos; es la cruz predicha por Jesús cuando subió al monte de las bienaventuranzas y pronunció las palabras que fueron una verdadera revelación para sus discípulos:

Dichosos vosotros cuando os ultrajen, os persigan y mintiendo, digan de vosotros cosas malas, falsas, etc., por mi causa. Ser perseguidos por amor a Jesús es una bienaventuranza. Alegraos porque será grande vuestra recompensa en los cielos.


   Oración final, P.J.Loez
 Miranos Amigo y Señor y no dejes de mirarnos, contigo podemos caminar seguros y hacer frente con la fe en tu presencia a las dificultades de nuestra vida. Que tu Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
 SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN VOS CONFIO, 3 veces.


21.-LA MORTIFICACIÓN

 Es el mandato de Jesús. Mandato duro para los cristianos débiles y demasiado apegados a las propias comodidades. Mandato suave y dulce para aquellas almas que sienten la belleza de la perfección, gustan las dulzuras íntimas de la vida cristiana. "Quien quiera seguirme, debe renunciar a sí mismo" Para seguirle, para ser verdaderos cristianos, debemos corregir nuestros defectos, mortificar nuestras pasiones y nuestros sentidos.
 El primer médico de nosotros somos nosotros mismos. Para conocerte bien debes hacer el examen de conciencia cada día, cuando estás libre de ocupaciones materiales. ¿Cómo regulas tus pasiones? ¿Reina en tu corazón la soberbia, la avaricia, la cólera, la indiferencia en hacer el bien, la envidia del bien ajeno? Bajo la excusa de la prudencia, ¿ no escondes, quizá el respeto humano? ¿Cómo mortificas tus sentidos?


 Oración final, P.J.Loez
 Miranos Amigo y Señor y no dejes de mirarnos, contigo podemos caminar seguros y hacer frente con la fe en tu presencia a las dificultades de nuestra vida. Que tu Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
 SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN VOS CONFIO, 3 veces. 
Qué significa la imagen del Sagrado Corazón de Jesús? - Historias ...

20.-LA CASTIDAD

 El Corazón de Jesús es el emblema de la inocencia. Él quiere ser el cordero sin mancha que se alimenta en un jardín de lirios. En su vida terrena, Jesús escoge un precursor, mártir de la castidad; ofrece sus confidencias a un discípulo, Juan, que es virgen. "Bienaventurados los limpios de corazón porque ellos verán a Dios". La Iglesia amará la castidad como el ornamento más delicado y suave de sus ministros ... y los santos la magnificarán como la virtud angélica... creadora de los ángeles sobre la tierra.


 Oración final, P.J.Loez
 Miranos Amigo y Señor y no dejes de mirarnos, contigo podemos caminar seguros y hacer frente con la fe en tu presencia a las dificultades de nuestra vida. Que tu Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
 SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN VOS CONFIO, 3 veces. 




19.-SED HUMILDES DE CORAZÓN

Cuando el Corazón de Jesús quiso enseñarnos algo de sí mismo, lo dijo con una sola frase: "Aprended de Mí que soy manso y humilde de corazón". Debe tener, pues, un gran valor esta humildad si Jesús la estimó de tal manera hasta anteponerla a todas las demás virtudes. Él recomienda la castidad, la caridad, la obediencia, pero ninguna de estas virtudes da el privilegio que da a la humildad con estas palabras:

 "Aprended de Mí que soy manso y humilde de corazón". Los santos comprendieron bien esta sublime doctrina y no buscaron la santidad sino por medio de la humildad, persuadidos de que la humildad es el fundamento de todas las virtudes, el principio de toda gloria. La misma Virgen confiesa haber recibido insignes favores del Señor porque Él vio " la humildad de su esclava".

Oración final, P.J.Loez

 Miranos Amigo y Señor y no dejes de mirarnos, contigo podemos caminar seguros y hacer frente con la fe en tu presencia a las dificultades de nuestra vida. Que tu Corazón sea el impulso de nuestra vida y que nos mueva siempre a buscar los signos de tu presencia en cada dia. Te lo pedimos por Jesucristo Nuestro Señor.
 SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS EN VOS CONFIO, 3 veces.


domingo, 23 de junio de 2024

SAN JUAN BAUTISTA

24 DE JUNIO        SAN JUAN BAUTISTA

 Felicidades a todos los que celebran hoy su santo





La Iglesia celebra normalmente la fiesta de los santos en el día de su nacimiento a la vida eterna, que es el día de su muerte.
 En el caso de San Juan Bautista, se hace una excepción y se celebra el día de su nacimiento. San Juan, el Bautista, fue santificado en el vientre de su madre cuando la Virgen María, embarazada de Jesús, visita a su prima Isabel, según el Evangelio.

Esta fiesta conmemora el nacimiento "terrenal" del Precursor.
 Fue una de las primeras fiestas religiosas y, en ella, la Iglesia nos invita a recordar y a aplicar el mensaje de Juan.

SU NACIMIENTO



Isabel, la prima de la Virgen María estaba casada con Zacarías, quien era sacerdote, servía a Dios en el templo y esperaba la llegada del Mesías que Dios había prometido a Abraham.
No habían tenido hijos, pero no se cansaban de pedírselo al Señor.
Vivían de acuerdo con la ley de Dios.
  Un día, un ángel del Señor se le apareció a Zacarías, quien se sobresaltó y se llenó de miedo. El Árcangel Gabriel le anunció que iban a tener un hijo muy especial, pero Zacarías dudó y le preguntó que cómo sería posible esto si él e Isabel ya eran viejos.
 Entonces el ángel le contestó que, por haber dudado, se quedaría mudo hasta que todo esto sucediera. Y así fue.
La Virgen María, al enterarse de la noticia del embarazo de Isabel, fue a visitarla.
 Y en el momento en que Isabel oyó el saludo de María, el niño saltó de júbilo en su vientre.




 Éste es uno de los muchos gestos de delicadeza, de servicio y de amor que tiene la Virgen María para con los demás.
 Antes de pensar en ella misma, también embarazada, pensó en ir a ayudar a su prima Isabel.
El ángel había encargado a Zacarías ponerle por nombre Juan.
Con el nacimiento de Juan, Zacarías recupera su voz y lo primero que dice es: "Bendito el Señor, Dios de Israel". Juan creció muy cerca de Dios. Cuando llegó el momento, anunció la venida del Salvador, predicando el arrepentimiento y la conversión y bautizando en el río Jordán.

Juan iba vestido de pelo de camello, llevaba un cinturón de cuero y se alimentaba de langostas y miel silvestre.



Venían hacia él los habitantes de Jerusalén y Judea y los de la región del Jordán. Juan bautizaba en el río Jordán y la gente se arrepentía de sus pecados.
Predicaba que los hombres tenían que cambiar su modo de vivir para poder entrar en el Reino que ya estaba cercano.
 El primer mensaje que daba Juan Bautista era el de reconocer los pecados, pues, para lograr un cambio, hay que reconocer las fallas.

 El segundo mensaje era el de cambiar la manera de vivir, esto es, el de hacer un esfuerzo constante para vivir de acuerdo con la voluntad de Dios.
Esto serviría de preparación para la venida del Salvador. En suma, predicó a los hombres el arrepentimiento de los pecados y la conversión de vida.


Juan reconoció a Jesús al pedirle Él que lo bautizara en el Jordán.
 En ese momento se abrieron los cielos y se escuchó la voz del Padre que decía: "Éste es mi Hijo amado...". Juan dio testimonio de esto diciendo: "Éste es el Cordero de Dios...".
Reconoció siempre la grandeza de Jesús, del que dijo no ser digno de desatarle las correas de sus sandalias, al proclamar que él debía disminuir y Jesús crecer porque el que viene de arriba está sobre todos.


Fue testigo de la verdad hasta su muerte.

SU MARTIRIO

 Murió por amor a ella. Herodías, la mujer ilegítima de Herodes, pues era en realidad la mujer de su hermano, no quería a Juan el Bautista y deseaba matarlo, ya que Juan repetía a Herodes: "No te es lícito tenerla".

 
 La hija de Herodías, en el día de cumpleaños de Herodes, bailó y agradó tanto a su padre que éste juró darle lo que pidiese. Ella, aconsejada por su madre, le pidió la cabeza de Juan el Bautista.
Herodes se entristeció, pero, por el juramento hecho, mandó que le cortaran la cabeza de JuanBautista que estaba en la cárcel.

viernes, 21 de junio de 2024

DOMINGO XI DEL TIEMPO ORDINARIO

 SÁBADO

“ No os agobiéis por el mañana ”



según san Mateo 6, 24-34 

El Señor nos invita a tener una mirada contemplativa de la creación. ¡Mirad los lirios del campo! Son una verdadera maravilla. Nuestra vista se recrea con sus colores tan bellos y nuestro cuerpo con sus perfumes tan exquisitos. Y todo como regalo del Padre.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Nadie puede servir a dos señores. Porque despreciará a uno y amará al otro; o, al contrario, se dedicará al primero y no hará caso del segundo.

 No podéis servir a Dios y al dinero. Por eso os digo: No estéis agobiados por vuestra vida pensando qué vais a comer, ni por vuestro cuerpo pensando con qué os vais a vestir. 

¿No vale más la vida que el alimento, y el cuerpo que el vestido? Mirad los pájaros: ni siembran, ni siegan, ni almacenan y, sin embargo, vuestro Padre celestial los alimenta.

 ¿No valéis vosotros más que ellos? ¿Quién de vosotros, a fuerza de agobiarse, podrá añadir una hora al tiempo de su vida?

 ¿Por qué os agobiáis por el vestido? Fijaos cómo crecen los lirios del campo: ni trabajan ni hilan. Y os digo que ni Salomón, en todo su fasto, estaba vestido como uno de ellos. 

¿Cómo crecen los lirios? No necesitan la presencia de un campesino que tire de ellos sino sólo la presencia silenciosa del Padre que, en el momento oportuno, envía el sol, el aire, y la lluvia, es decir, sus caricias de Padre.

Pues, si a la hierba, que hoy está en el campo y mañana se arroja al horno, Dios la viste así, ¿no hará mucho más por vosotros, gente de poca fe? 

No andéis agobiados, pensando qué vais a comer, o qué vais a beber, o con qué os vais a vestir. Los paganos se afanan por esas cosas. Ya sabe vuestro Padre celestial que tenéis necesidad de todo eso.

Y si Jesús recrea su vista en la contemplación de la Naturaleza, ¿cómo no va a contemplar la obra suprema de la naturaleza, que es el hombre?

 Buscad sobre todo el reino de Dios y su justicia; y todo esto se os dará por añadidura. Por tanto, no os agobiéis por el mañana, porque el mañana traerá su propio agobio. A cada día le basta su desgracia».

Jesús goza contemplando a una persona que ha puesto todo su corazón en Dios, su Dueño y Señor. Mientras vivimos no debemos ser egoístas, pensando sólo en nosotros mismos. Pensemos en Dios, nuestro Padre Bueno, que ha creado todo por amor.


Pensemos en alabarle, bendecirle, agradarle. Caigamos en la cuenta de lo maravilloso que debe ser una vida entregada a Dios y a los hermanos, sin pensar en otra recompensa que el agradar a DIOS en todo.


VIERNES

“ Donde está tu tesoro allí estará tu corazón ”


Hay en este evangelio dos palabras muy unidas: tesoro y corazón. Si preguntamos cuál fue el verdadero tesoro de Jesús, sin duda, el verdadero tesoro de Jesús fue su Padre. Nos dice San Juan que, desde toda la eternidad, el Verbo estaba volcado, inclinado, gravitando junto al Padre (Jn. 1,1).

según san Mateo 6,19-23

 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No atesoréis para vosotros tesoros en la tierra, donde la polilla y la carcoma los roen, donde los ladrones abren boquetes y los roban. 

Y esta actitud la mantuvo también aquí en su vida mortal. El hacer la voluntad del Padre, el dar gusto al Padre ha sido el móvil de su vida, ha sido la razón de su existencia. Y, junto a este tesoro, Jesús ha tenido otro: guardar como un verdadero regalo a los que el Padre le ha entregado:

Atesorad tesoros en el cielo, donde no hay polilla ni carcoma que se los roen, ni ladrones que abran boquetes y roban.

Entonces, ¿dónde ha puesto Jesús su corazón? En el amor al padre y en el amor a nosotros que somos “regalos del Padre”. Siendo esto así ahora no nos extraña que Jesús insista en que debemos tener siempre el corazón libre para amar a Dios y amar a los hermanos.

 Porque donde está tu tesoro allí estará tu corazón. La lámpara del cuerpo es el ojo. Si tu ojo está sano, tu cuerpo entero tendrá luz; si tu ojo está enfermo, tu cuerpo entero estará a oscuras.

 Si, pues, la luz que hay en ti está oscura, ¡cuánta será la oscuridad!».


Señor, en el evangelio de este día nos hablas de un tesoro. Y para mí, el único tesoro de mi vida eres Tú.

 Me pregunto: ¿Y qué pasaría de mí si Tú no estuvieras? Mi vida sería una vida malograda, una vida sin sentido. ¿Dónde dirigir mi mirada si no pudiera verte? ¿Dónde inclinar mis oídos si no pudiera oírte? ¿Hacia dónde elevar mis brazos si no fueras mi norte? ¿En quién inclinaría mi cabeza cansada si tu corazón estuviera ausente? Sólo en Ti descansa mi alma.


JUEVES

“ Danos hoy el pan nuestro ”



según san Mateo 6,7-15 

Tal vez el haber dejado la oración sea uno de los males peores de nuestro cristianismo actual. La oración cristiana es sumamente fácil: sólo hace falta una cosa: “dejarse querer por Dios”.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando recéis, no uséis muchas palabras, como los gentiles, que se imaginan que por hablar mucho les harán caso. No seáis como ellos, pues vuestro Padre sabe lo que os hace falta antes de que lo pidáis. 

Cuando Jesús subía al monte a orar se sentía fuertemente atraído por la ternura del Padre. Para Jesús, orar era algo así como “empaparse de cariño”. Por eso, al querer expresarnos esa experiencia, tiene que acudir a la palabra aramea ABBA.

Vosotros orad así: “Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre, venga a nosotros tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo, danos hoy nuestro pan de cada día, perdona nuestras ofensas, como también nosotros perdonamos a los que nos han ofenden, no nos dejes caer en la tentación, y líbranos del mal”. 

Cuando Jesús nos enseñó esta sublime oración no nos dejó una doctrina sino una experiencia suya con el Padre. Orar es hacer experiencia de Dios, sentirse amado, abrazado, estrechado por nuestro Padre.

Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, también os perdonará vuestro Padre celestial, pero si no perdonáis a los hombres, tampoco vuestro Padre perdonará vuestras ofensas».


Hoy, Señor, te pido que me enseñes a orar. Los judíos rezaban mucho, pero estaban muy lejos de la oración de Jesús. 

Yo te pido que me enseñes a orar como Tú orabas: con aquella sencillez, humildad, confianza y ternura con que un niño habla con su Papá. De esta manera mi oración me llevará hasta el mismo corazón del Padre.

MIÉRCOLES

“ Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres ”

Vivimos en el mundo de la imagen.
 Los productos que no se anuncian en T.V no se venden. Y las personas que no salen nunca en la pequeña pantalla no son importantes. Por eso nuestro mundo se alimenta de cosas superficiales. Importa más el aparentar que el ser; interesa más la fachada que el interior de la casa; y estamos más pendientes del qué dirá la gente, que del qué dirá Dios

según san Mateo 6,1-6.16-18 
En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres para ser vistos por ellos; de lo contrario no tendréis recompensa de vuestro Padre celestial.
 Por tanto, cuando hagas limosna, no mandes tocar la trompeta ante ti, como hacen los hipócritas en las sinagogas y por las calles para ser honrados por la gente; en verdad os digo que ya han recibido su recompensa. 

Jesús no vive pendiente de su imagen, al contrario. Vivió feliz en el anonimato: “pasó por la vida como uno más, como uno de tantos” (Fil. 2,7). Por eso no podía soportar a los hipócritas, a los fariseos, a todos los que obraban para ser vistos por los hombres. Y luchó para que no se usara la religión –limosna, ayunos, oración- para prestigio personal. Jesús nos dice que a Dios hay que buscarlo “en lo secreto, en lo escondido”.
Tú, en cambio, cuando hagas limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha; así tu limosna quedará en secreto y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará 
Cuando oréis, no seáis como los hipócritas, a quienes les gusta orar de pie en las sinagogas y en las esquinas de las plazas, para que los vean los hombres. 

En verdad os digo que ya han recibido su recompensa. Tú, en cambio, cuando ores, entra en tu cuarto, cierra la puerta y ora a tu Padre, que está en lo secreto, y tu Padre, que ve en lo secreto, te lo recompensará. 
Por eso no hay que salir fuera para encontrarnos con Dios. Jesús nos remite a lo escondido del corazón, donde habita Dios. Ahí está nuestro verdadero tesoro, nuestra perla más fina, nuestro manantial más profundo. Encontrar ahí al verdadero Dios es nuestra mejor recompensa.

Cuando ayunéis, no pongáis cara triste, como los hipócritas que desfiguran sus rostros para hacer ver a los hombres que ayunan. En verdad os digo que ya han recibido su paga. Tú, en cambio, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, para que tu ayuno lo note, no los hombres, sino tu Padre, que está en lo escondido; y tu Padre, que ve en lo escondido, te recompensará». 



 Señor, hoy no vengo a pedirte que me hagas más fácil lo difícil; ni más dulce lo amargo; ni más sabroso lo soso; te pido que me hagas posible lo imposible. Porque amar al enemigo humanamente es imposible. Si, a pesar de todo, me lo pides y me lo exiges, es para que caiga en la cuenta de la necesidad que tengo de rezar


MARTES

“ Amad a vuestros enemigos ”


según san Mateo 5,43-48 

Un paso más en ese camino de perfeccionamiento que Jesús pone por delante de sus discípulos.

En este evangelio el Señor nos manda “hacer lo posible y pedir lo imposible”. Lo posible es ir avanzando, con esfuerzo, en el terreno de nuestros comportamientos. Y, dentro de ellos, está el intentar no hacer daño a nadie, y el ayudar al que se encuentra en una situación límite y necesita nuestro apoyo.

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: "Amarás a tu prójimo" y aborrecerás a tu enemigo. 

 Los cristianos tienen que distinguirse por una mirada compasiva hacia el que los odia, a imitación del Padre celestial que hace salir el sol para malos y buenos y envía la lluvia para justos e injustos.

Pero yo os digo: amad a vuestros enemigos y rezad por los que os persiguen, para que seáis hijos de vuestro Padre celestial, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y manda la lluvia a justos e injustos. 

Es imposible el amar a nuestros enemigos. Si un día resulta que nos sale del corazón el quererlos es por puro don, por puro regalo de Dios. Y la oración llega hasta eso.

Porque, si amáis a los que os aman, ¿qué premio tendréis? ¿No hacen lo mismo también los publicanos?

 Y si saludáis sólo a vuestros hermanos, ¿qué hacéis de extraordinario? ¿No hacen lo mismo también los gentiles? Por tanto, sed perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto».

Se trata, como escribirá Pablo, de no dejarse vencer por el mal, sino vencer al mal con el bien.
Señor, que propone amar sin reciprocidad, sin esperar nada a cambio, sin tener ningún motivo por el que amar a quien -en los cálculos humanos- no se lo merece, simplemente a imagen de la gratuidad con que Dios manda la lluvia y hace salir el sol cada día sin excluir a ninguno de sus hijos de sus beneficios ni exigir nada a cambio.


LUNES

“ A quien te pide, dale ”



según san Mateo 5, 38-42 

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo: “Ojo por ojo, diente por diente”.

En la lectura evangélica (Mt 5,38-42), Jesús continúa su catequesis sobre la nueva interpretación de la Ley basada en el Amor. “

 Pero os digo: no hagáis frente al que os agravia. 

Al contrario, si uno te abofetea en la mejilla derecha, preséntale la otra; al que quiera ponerte pleito para quitarte la túnica, dale también el manto; a quien te requiera para caminar una milla, acompáñale dos; a quien te pide, dale, y al que te pide prestado, no lo rehuyas».

Qué difícil nos lo plantea Jesús! Difícil cuando lo vemos desde la perspectiva del mundo secular que nos llama a “dar a cada cual según se merece”, al éxito, al confort, a acumular posesiones, al egoísmo; la cultura del “yo”. 

Pero para el que ha tenido un encuentro personal con Jesús y ha conocido su Amor, esa exhortación de parte de Jesús resulta fácil, y hasta lógica.

Cuando Dios se convierte en el centro de nuestras vidas, todo adquiere un nuevo significado al punto que todo lo demás lo estimamos “basura”

 Y tú, ¿has tenido un encuentro personal con Jesús? Él te ha llamado por tu nombre y tan solo está esperando tu respuesta. Anda, ábrele la puerta. Y cuando te diga: “Sígueme”, no lo pienses; ¡síguelo! Créeme, no te arrepentirás.


 Y tú, ¿has tenido un encuentro personal con Jesús? Él te ha llamado por tu nombre y tan solo está esperando tu respuesta. Anda, ábrele la puerta. Y cuando te diga: “Sígueme”, no lo pienses; ¡síguelo! Créeme, no te arrepentirás.

DOMINGO

“ La semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo ”

Dejando atrás las celebraciones litúrgicas de Pentecostés, la Santísima Trinidad y Corpus Christi, la liturgia dominical retoma el tiempo ordinario, y la lectura evangélica de hoy (Mc 4,26-34) nos presenta dos parábolas, ambas relacionadas con la agricultura

según San Marcos 4, 26-34

En aquel tiempo, Jesús decía al gentío: «El reino de Dios se parece a un hombre que echa semilla en la tierra. Él duerme de noche y se levanta de mañana; la semilla germina y va creciendo, sin que él sepa cómo. La tierra va produciendo fruto sola: primero los tallos, luego la espiga, después el grano. Cuando el grano está a punto, se mete la hoz, porque ha llegado la siega».

Así es el Reino de Dios, como una semilla viva que hay que sembrar. No nos podemos cruzar de brazos. Hay que sembrar, hay que arriesgarse. Y el campo en que hemos de sembrarla son las almas de los que nos escuchan anunciar ese Reino. ¡Tenemos que sembrar!

Dijo también: «¿Con qué compararemos el reino de Dios? ¿Qué parábola usaremos?

Con un grano de mostaza: al sembrarlo en la tierra es la semilla más pequeña, pero después de sembrada crece, se hace más alta que las demás hortalizas y echa ramas tan grandes que los pájaros pueden anidar a su sombra». Con muchas parábolas parecidas les exponía la palabra, acomodándose a su entender. Todo se lo exponía con parábolas, pero a sus discípulos les explicaba todo en privado.

Ninguna semilla es demasiado pequeña. Si hemos recibido la Palabra de Dios anunciando el Reino, tan solo tenemos que arriesgarnos, atrevernos a regar la semilla. No olvidemos que esa Palabra tiene poder creador, capaz de hacerla germinar aún en las condiciones más desfavorables.

El mensaje de Jesús es consistente: “Vayan por todo el mundo, anuncien la Buena Noticia a toda la creación” (Mc 16,15).
 No me canso de repetirlo: ¡Atrévete!



martes, 18 de junio de 2024

Y POR FIN VISITAR LA BASILICA, INTERIOR

 VESTIBULO DE ENTRADA Y LA REJA

La Basílica tiene 262 m. de longitud y alcanza su máxima altura en el crucero, donde se alza hasta los 41 m. 

Después de atravesar los vestíbulos de entrada


 La gran reja





que da acceso propiamente al espacio de la iglesia: es obra de José Espinós y en ella están representados varios santos españoles y extranjeros.

 Justo antes de pasar la reja, dos ángeles con espadas, de Carlos Ferreira, custodian la entrada como los ángeles del Paraíso. 

Izquierda


Derecha



Según testimonio del fundidor, están elaborados con bronce de cañones de la guerra, en señal de que ésta por fin ha terminado.

Volviéndose hacia el exterior, se observa en lo alto la imagen de Nuestra Señora del Valle, de Ramón Lapayese, obra en alabastro de algo más de 2 m. de altura. Por un efecto óptico y la distancia desde el suelo, a quien la contempla le parece sin embargo más pequeña que él mismo.

LA NAVE

 La nave está a un nivel más bajo para realzar el presbiterio y romper la monotonía de un espacio tan largo: fue un verdadero acierto de los arquitectos. 

Inicialmente iba a tener sólo 9 metros de ancho por otros tantos de alto, pero se comprendió que esas dimensiones causarían sensación de claustrofobia y se decidió agrandar. Ahora tiene un ancho de 18 metros.

A la nave se baja por una escalinata. y da la sensación que la belleza que encuentras es como si te llevara en volanda

A la nave se baja por una escalinata. y da la sensación que la belleza que encuentras es como si te llevara en volanda hastasubir estas esclinta que te llevan al ligr sagrado.



LAS CAPILLAS LATERALES DE LA NAVE 
A lo largo de la nave, existen seis capillas en los laterales dedicadas a distintas advocaciones de la Virgen como Patrona de los Ejércitos y por su vinculación a aspectos importantes de la Historia de España. 
Los otros elementos escultóricos y pictóricos en el interior de cada capilla son obra de la familia Lapayese. Se trata, en cada una, de dos imágenes en alabastro de los Apóstoles, de tal modo que conforman el conjunto de los doce (por supuesto, en lugar de Judas Iscariote se encuentra ya San Matías). 




Como elemento pictórico, en cada capilla hay un tríptico de estilo gótico flamenco del siglo XV (elaborados en el siglo XX por la familia Lapayese) y un frontal de altar en relieve; en ambos casos representan escenas de la vida de Cristo y de la Virgen María.

Por orden de entrada, a la derecha: 
Inmaculada Concepción, 


La Inmaculada Concepción es la Patrona de España y del Arma de Infantería, y por extensión ampara al Ejército de Tierra. Los Tercios españoles se encomendaron a Ella desde el siglo XVI y en las universidades españolas se hacía el “voto de la Inmaculada”, por el que los universitarios se comprometían a defender el privilegio mariano.



Cada año, en las segundas vísperas de la Inmaculada, los monjes junto con los niños escolanos realizan una procesión a la capilla para renovar una consagración a la Inmaculada que se hace en todos los monasterios de la Congregación de Solesmes desde los inicios de ésta, pues se la confió también su fundador, Dom Próspero Guéranger.



Nuestra Señora del Carmen (ambas son obra de Carlos Ferreira)

Nuestra Señora del Carmen es la Patrona de la Armada y de todo el mundo marinero, ya que se apareció en el mar al carmelita inglés San Simón Stock. Por eso aparece sobre una barca, como con frecuencia la veneran los pescadores. Varias naciones hispanoamericanas la tienen también por Patrona nacional o de algunas regiones: así, es la Patrona principal de Chile (Nuestra Señora del Carmen de Maipú).




En la fiesta de la Presentación del Niño Jesús y Purificación de María (“la Candelaria”, el 2 de febrero), al inicio de la Santa Misa, tiene lugar otra bella procesión de los monjes y los niños escolanos a la capilla, ya que el misterio está representado en ella.

 y Nuestra Señora de Loreto (Ramón Mateu);
La Virgen de Loreto es la Patrona del Ejército del Aire. Aparece representada en su casa siendo transportada por los ángeles, conforme a la tradición piadosa.





 a la izquierda;
 Nuestra Señora de África (Ferreira), 

Nuestra Señora de África es una advocación de gran tradición en Ceuta y en los territorios que conformaron el Marruecos español, donde se produjo el alzamiento que dio paso al conflicto de 1936-39. La representación es una Piedad de tipo bizantino tardío.







Nuestra Señora de la Merced (Ramón Lapayese)

La Virgen de la Merced, de gran raigambre en Barcelona y en Cataluña, ha sido muy venerada también en otras partes de España, de Europa y de América, gracias a la Orden de los frailes mercedarios, que nació para liberar a cautivos cristianos en tierras del Islam pagando su rescate o incluso entregándose ellos mismos a cambio de éstos. Es Patrona principal o secundaria de algunas naciones: por ejemplo, Perú, Ecuador y República Dominicana. Los mercedarios realizaron una gran labor misionera en América y expandieron su devoción allí. En La Basílica recuerda a todos los presos durante la guerra de 1936-39 y a quienes después redimieron condena por medio del trabajo.






 y Nuestra Señora del Pilar (Mateu).

Nuestra Señora del Pilar es Patrona de la Hispanidad y de la Guardia Civil. La imagen de Ella que se observa en esta capilla es absolutamente original: en vez de la representación típica, el artista ha sacado a la Virgen fuera de la columna y el Niño Jesús está apoyando un pie sobre ella. Por una parte, tiene una motivación funcional, para poder aprovechar el espacio sin que la Virgen quede muy reducida en tamaño. Por otro lado, se puede hacer una lectura teológica: Cristo es la verdadera piedra angular y sobre Él se levanta todo el edificio de la Iglesia.








En los espacios entre cada capilla hay ocho tapices con escenas del Apocalipsis, copia de una colección flamenca del siglo XVI adquirida por Carlos V y traída a España por Felipe II.

 Los originales se encuentran en el Palacio de La Granja. 
No obstante, estas copias tienen un destacado valor.

Detrás de cada capilla y de las dos grandes capillas laterales del crucero (Santísimo y Sepulcro), descansan los restos de casi 34.000 caídos, conforme al registro existente de ellos, ó más de 50.000 e incluso hasta cerca de 70.000 según otras estimaciones muy probables. Son caídos de ambos bandos, procedentes de todas las regiones de España, en señal de hermanamiento y reconciliación.

EL ACCESO AL CRUCERO 

Una vez que se suben las escaleras de la nave dirigiéndose hacia el crucero, se observan a los lados ocho estatuas sobre sendas pilastras, obra de Antonio Martín y Luis Sanguino, con la cabeza inclinada y cubierta, invitando a una actitud de respeto y silencio, porque el visitante se encuentra en un espacio sagrado y concretamente en un gran cementerio de guerra. Representan a contendientes caídos en la guerra por tierra, mar y aire y como voluntarios.