UNA VENTANA ABIERTA AL ARTE RELIGIOSO,FIESTAS, TRADICIONES,SEMANA SANTA Y MÁS COSAS RELACIONADAS CON MI PUEBLO,SIRUELA.PARA QUE MIS HIJOS Y SOBRINOS SIEMPRE LO RECUERDEN Y DEDICADA AL COFRADE DE LA FAMILIA, HERMANA, AMIGOS Y VECINOS.
Páginas
▼
domingo, 30 de diciembre de 2018
ESCULTURAS DE LA SAGRADA FAMILIA
En la festividad de la Sagrada Familia, recordamos y celebramos que Dios quiso nacer dentro de una familia para que tuviera alguien que lo cuidara, lo protegiera, lo ayudara y lo aceptara como era. Al nacer Jesús en una familia, el Hijo de Dios ha santificado la familia humana. Por eso nosotros veneramos a la Sagrada Familia como Familia de Santos.
María y José cuidaban a Jesús, se esforzaban y trabajaban para que nada le faltara, tal como lo hacen todos los buenos padres por sus hijos.
José era carpintero, Jesús le ayudaba en sus trabajos, ya que después lo reconocen como el “hijo del carpintero”.
María se dedicaba a cuidar que no faltara nada en la casa de Nazaret.
Tal como era la costumbre en aquella época, los hijos ayudaban a sus mamás moliendo el trigo y acarreando agua del pozo y a sus papás en su trabajo. Podemos suponer que en el caso de Jesús no era diferente. Jesús aprendió a trabajar y a ayudar a su familia con generosidad. Él siendo Todopoderoso, obedecía a sus padres humanos, confiaba en ellos, los ayudaba y los quería.
-- Diego de Siloé
¡Qué enseñanza nos da Jesús, quien hubiera podido reinar en el más suntuoso palacio de Jerusalén siendo obedecido por todos! Él, en cambio, rechazó todo esto para esconderse del mundo obedeciendo fielmente a María y a José y dedicándose a los más humildes trabajos diarios, el taller de San José y en la casa de Nazaret.
Las familias de hoy, deben seguir este ejemplo tan hermoso que nos dejó Jesús tratando de imitar las virtudes que vivía la Sagrada Familia: sencillez, bondad, humildad, caridad, laboriosidad, etc.
La familia debe ser una escuela de virtudes. Es el lugar donde crecen los hijos, donde se forman los cimientos de su personalidad para el resto de su vida y donde se aprende a ser un buen cristiano. Es en la familia donde se formará la personalidad, inteligencia y voluntad del niño. Esta es una labor hermosa y delicada. Enseñar a los niños el camino hacia Dios, llevar estas almas al cielo. Esto se hace con amor y cariño.
Talla en madera policromada y estofada. Iglesia Parroquial de Orihuela (Alicante). Salzillo
La familia es la primera comunidad de vida y amor el primer ambiente donde el hombre puede aprender a amar y a sentirse amado, no sólo por otras personas, sino también y ante todo por Dios.” (Juan Pablo II, Encuentro con las Familias en Chihuahua 1990).
El Papa Juan Pablo II en su carta a las familias nos dice que es necesario que los esposos orienten, desde el principio, su corazón y sus pensamientos hacia Dios, para que su paternidad y maternidad, encuentre en Él la fuerza para renovarse continuamente en el amor.
Así como Jesús creció en sabiduría y gracia ante Dios y los hombres, en nuestras familias debe suceder lo mismo. Esto significa que los niños deben aprender a ser amables y respetuosos con todos, ser estudiosos obedecer a sus padres, confiar en ellos, ayudarlos y quererlos, orar por ellos, y todo esto en familia.
Recordemos que “la salvación del mundo vino a través del corazón de la Sagrada Familia”. La salvación del mundo, el porvenir de la humanidad de los pueblos y sociedades pasa siempre por el corazón de toda familia. Es la célula de la sociedad.
domingo, 23 de diciembre de 2018
MENSAJE DEL ARZOBISPO DE BURGOS
NAVIDAD 2018
Porque la Navidad no es un hecho del pasado: es un acontecimiento de gracia y de amor de Dios; es la Buena Noticia, que se perpetúa en el tiempo y vuelve año tras año para decirnos que Dios quiere entrar en nuestras vidas: «Estoy a la puerta y llamo, dice el Señor; si alguien escucha mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaré con él, y él conmigo» (Ap. 3, 20).
El árbol de Navidad con sus luces, «nos recuerda que Jesús es la luz del mundo, la luz del alma que aleja las oscuridades y hace espacio al perdón». Este signo de la luz, «simboliza a Dios que con el nacimiento de su Hijo Jesús ha bajado hasta el hombre para alzarlo hacia sí y elevarlo sobre las tinieblas del egoísmo y del pecado».
Por otro lado el pesebre «habla, desde su pobreza, de la sencillez, la pequeñez y también la fragilidad con la que Dios se ha mostrado con el nacimiento de Jesús en la precariedad de Belén». El Niño Jesús, «Hijo de Dios y nuestro Salvador, que colocamos en el pesebre, es Santo en pobreza, pequeñez, sencillez, humildad». «Dios Niño irradia luz en la humildad del pesebre» para que seamos también «testigos de humildad, ternura y bondad»
.
El Niño que vemos en el portal es Dios mismo que se ha hecho hombre para mostrarnos cuánto nos quiere, cuánto nos ama; para darnos esperanza, para decirnos que nunca estamos solos.
Navidad es un acontecimiento de gracia y de amor de Dios. Dios está con nosotros. Pidámosle para todo el mundo la bondad, la misericordia y la ternura que contemplamos en el Portal. ¡Os deseo de corazón una santa y feliz Navidad!
Porque la Navidad no es un hecho del pasado: es un acontecimiento de gracia y de amor de Dios; es la Buena Noticia, que se perpetúa en el tiempo y vuelve año tras año para decirnos que Dios quiere entrar en nuestras vidas: «Estoy a la puerta y llamo, dice el Señor; si alguien escucha mi voz y abre la puerta, entraré en su casa y cenaré con él, y él conmigo» (Ap. 3, 20).
El árbol de Navidad con sus luces, «nos recuerda que Jesús es la luz del mundo, la luz del alma que aleja las oscuridades y hace espacio al perdón». Este signo de la luz, «simboliza a Dios que con el nacimiento de su Hijo Jesús ha bajado hasta el hombre para alzarlo hacia sí y elevarlo sobre las tinieblas del egoísmo y del pecado».
Por otro lado el pesebre «habla, desde su pobreza, de la sencillez, la pequeñez y también la fragilidad con la que Dios se ha mostrado con el nacimiento de Jesús en la precariedad de Belén». El Niño Jesús, «Hijo de Dios y nuestro Salvador, que colocamos en el pesebre, es Santo en pobreza, pequeñez, sencillez, humildad». «Dios Niño irradia luz en la humildad del pesebre» para que seamos también «testigos de humildad, ternura y bondad»
.
El Niño que vemos en el portal es Dios mismo que se ha hecho hombre para mostrarnos cuánto nos quiere, cuánto nos ama; para darnos esperanza, para decirnos que nunca estamos solos.
Navidad es un acontecimiento de gracia y de amor de Dios. Dios está con nosotros. Pidámosle para todo el mundo la bondad, la misericordia y la ternura que contemplamos en el Portal. ¡Os deseo de corazón una santa y feliz Navidad!
sábado, 22 de diciembre de 2018
SAN ESTEBAN Y LA PINTURA
-------Entierro de San Esteban, Juan de Juanes, M del Prado
De los Hechos de los apóstoles 7, 44-8, 4
En aquellos días, Esteban prosiguió su discurso, diciendo:
«Nuestros padres tuvieron consigo, en el desierto, el tabernáculo del testimonio. Así lo había dispuesto el que mandó a Moisés fabricarlo según el modelo que le había mostrado. Nuestros padres lo recibieron en herencia y lo introdujeron, bajo la dirección de Josué, en la tierra que ocupaban los gentiles, a quienes arrojó Dios para dar lugar a nuestros padres. Y así hasta los días de David. David halló gracia a los ojos de Dios. Pidió el privilegio de construir morada para el Dios de Jacob; pero fue Salomón quien se la edificó, aunque ciertamente el Altísimo no habita en casas construidas por los hombres, como dice el profeta: "El cielo es mi trono y la tierra es escabel de mis pies. ¿Qué casa me vais a construir -dice el Señor-, o cuál va a ser el lugar de mi descanso? ¿No soy yo quien ha hecho todas estas cosas?"
La capilla está dedicada al llamado protomártir, es decir, el primero que entregó su vida por la fe, imitando a nuestro Señor Jesucristo. Cordoba
La capilla está dedicada al llamado protomártir, es decir, el primero que entregó su vida por la fe, imitando a nuestro Señor Jesucristo.
Su retablo se compone de un amplio registro que alberga el gran lienzo en que se representa el martirio de San Esteban, diácono, pintado por Juan Luis Zambrano (Córdoba 1598-Sevilla, 1639).
La escena está distribuida en dos planos. En la parte baja, el martirio según Hechos, 7, 58.
Volviendo a la pintura de Zambrano, el Santo está figurado como un joven diácono que viste una hermosa dalmática roja -color que simboliza el martirio-, en cuyo frente se muestra una escena que parece representar el martirio del Santo, como se ve en los ornamentos del San Esteban de la pintura citada de el Greco. Se halla de rodillas, en el momento de ser apedreado. Su rostro, imberbe, dirige la transfigurada mirada al Cielo –como refiere el libro de los Hechos de los Apóstoles, todos los que estaban sentados en el Sanedrín, vieron su rostro como el rostro de un ángel [Hch 6, 15]-.
San Esteban murió perdonando: Después dobló las rodillas y dijo con fuerte voz: «Señor, no les tengas en cuenta este pecado» [Hch 7, 60]. Desde entonces, innumerables cristianos, mujeres y hombres, ancianos, adultos, jóvenes y niños; papas, obispos, sacerdotes, consagrados, vírgenes y laicos, han entregado la vida por Cristo, dando prueba de la fortaleza que Dios da a quienes desea sean sus testigos ante el mundo. Es una dolorosa constante en la historia de la Iglesia, que se prolonga hasta nuestros días. Pero también es una muestra gloriosa de que, como afirma nuestro Señor Jesucristo, quien quiera salvar su vida, la perderá; pero quien pierda su vida por mí y por el Evangelio, la salvará [Mc 8, 35].
Bernardo Daddi, Martirio de San Esteban
Las ocho tablillas formaban la predela de un políptico aún no identificado. Han sido atribuidas al pintor florentino Bernardo Daddi y su realización se sitúa en torno a 1345, en relación con la actividad tarda del artista.
Las pequeñas pinturas describen el martirio de San Esteban y la historia del hallazgo de sus reliquias según la narración medieval de la Leyenda Áurea de Jacobo de Vorágine: empiezan con la Lapidación del Santo,
sigue La aparición en sueño de San Gamaliel (maestro de San Pablo) a San Luciano, durante la cual le revela el lugar de la sepultura de su propio cuerpo junto con los de Abibo, su hijo, Nicodemo y San Esteban;
San Luciano cuenta a Juan la visión que ha tenido, Patriarca de Jerusalén, que hace buscar los cuerpos;
el Hallazgo de los cuerpos de los Santos Luciano, Abibo, Nicodemo y Esteban en el lugar indicado por Gamaliel;
el Traslado de los cuerpos de los Santos a Jerusalén, ciudad en la que el de San Esteban curó milagrosamente a Eudoxia, hija del Emperador Teodosio, poseída por un espíritu maligno;
el Segundo traslado a Roma; la Reunión del cuerpo de San Esteban con el de San Lorenzo en Roma
y por último, los Necesitados que imploran milagros en la tumba de los Santos Lorenzo y Esteban.
lunes, 17 de diciembre de 2018
sábado, 8 de diciembre de 2018
INMACULADA, MADRE DE LOS INFANTES
8 DE DICIEMBRE DE 1917
El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha bendecido este viernes el cuadro 'Madre de los Infantes', una obra del pintor Ricardo Sanz que se ha elaborado en conmemoración del CXXV aniversario de la proclamación de la Inmaculada Concepción como Patrona del Arma de Infantería, y que ha sido sufragada con colaboración económica voluntaria de todos los infantes de las distintas unidades del ejército de tierra.
Esta bendición ha tenido lugar previamente al acto militar que celebra la Academia de la Infantería de Toledo por este aniversario.
Se trata de la imagen de la virgen con una perspectiva más moderna, pues se puede apreciar en el mismo como debajo de la imagen están reflejados tres alumnos de la Academia de Infantería de Toledo, que posaron para ser retratados para la ocasión, y que "admiran" a su Patrona.
Tras inaugurar la obra, el autor de la misma ha explicado que le dió mucha importancia al estudio de la luz, y para ello realizó bocetos previos, añadiendo que ha intentado reflejar la imagen de la Patrona con sus "ojos de hoy", al tiempo que ha agradecido la labor al director de la Academia, Francisco Javier Marcos.
El cuadro es obra del pintor Ricardo Sanz, que recibió el encargo del director de la Academia de Infantería de Toledo. No ha sido la academia ni el Ejército de Tierra quienes han corrido con el pago de la pintura. Lo han pagado cadetes de la academia y militares de Infantería de diversas unidades, que hicieron una colecta de dinero para sufragar este cuadro destinado a la academia.
El arzobispo de Toledo, Braulio Rodríguez, ha bendecido este viernes el cuadro 'Madre de los Infantes', una obra del pintor Ricardo Sanz que se ha elaborado en conmemoración del CXXV aniversario de la proclamación de la Inmaculada Concepción como Patrona del Arma de Infantería, y que ha sido sufragada con colaboración económica voluntaria de todos los infantes de las distintas unidades del ejército de tierra.
Esta bendición ha tenido lugar previamente al acto militar que celebra la Academia de la Infantería de Toledo por este aniversario.
Se trata de la imagen de la virgen con una perspectiva más moderna, pues se puede apreciar en el mismo como debajo de la imagen están reflejados tres alumnos de la Academia de Infantería de Toledo, que posaron para ser retratados para la ocasión, y que "admiran" a su Patrona.
Tras inaugurar la obra, el autor de la misma ha explicado que le dió mucha importancia al estudio de la luz, y para ello realizó bocetos previos, añadiendo que ha intentado reflejar la imagen de la Patrona con sus "ojos de hoy", al tiempo que ha agradecido la labor al director de la Academia, Francisco Javier Marcos.
El cuadro es obra del pintor Ricardo Sanz, que recibió el encargo del director de la Academia de Infantería de Toledo. No ha sido la academia ni el Ejército de Tierra quienes han corrido con el pago de la pintura. Lo han pagado cadetes de la academia y militares de Infantería de diversas unidades, que hicieron una colecta de dinero para sufragar este cuadro destinado a la academia.
viernes, 7 de diciembre de 2018
MONUMENTOS A LA INMACULADA
MONUMENTO A LA INMACULADA EN CARRIÓN
Declarado que fue el dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María por el papa Pío IX el 8 de diciembre de 1854, desde 1903 se preparaba la diócesis palentina para festejar los 50 años jubilares de esta definición dogmática, y se proyectaba levantar un monumento en la plaza de la Catedral de la capital.
También en Carrión tuvieron lugar los preparativos de la fiesta, unidos en un solo corazón los externos de San Zoilo y especialmente las mujeres católicas y la congregación de Hijas de María.
Por aquel tiempo estaba destinado en Carrión el hermano coadjutor Álvaro González, quien vivía en San Zoilo con el cargo de comprador.
Cuando supo lo que pretendían hacer en Palencia, animado por Francisca Javiera del Valle, procuró y, con su ayuda, consiguió la piedra de las ruinas del monasterio de la abadía de Benevívere y animó al padre Modesto, director de las Hijas de María, a levantar un monumento a la Inmaculada. Convocaron a los párrocos y al Ayuntamiento y quedó formada una junta para recaudar el dinero, desmontar la piedra y levantar el monumento, y lo que faltase lo pondría el Ayuntamiento.
Llegó el día de la Inmaculada de 1904, y el pedestal estaba terminado, pero sin estatua.
Los carrioneses se consolaron con la leyenda de oro de la fiesta y el canto de esperanza de los poetas. Entraba el año 1905 sin resolver el problema. El padre Modesto enfermó y falleció en abril.
Por fin la estatua llegó de Roma. Se consiguió el dinero gracias al padre Suárez, que ocultamente lo recibió como entrega piadosa bajo riguroso secreto de confesión.
La imagen es de hierro bronceado, copia de la que existe en la plaza de España de Roma e igual a la que representa un cuadro en el monasterio de Santa Clara de Carrión.
Lucen doce bombillas en su corona, y la imagen se ilumina por la noche con potentes focos.
La inauguración tuvo lugar el domingo 19 de noviembre de 1905, día tempestuoso de viento y agua. Por la noche hubo una espléndida iluminación en toda la ciudad y un percutir caliente de tambores, desfiles y alegría.
El pueblo todo atronaba con sus cánticos y júbilos. En la plaza y en la iglesia de Santa María florecían las aspiraciones de las almas buenas. El monumento lucía un gigantesco anagrama de María.
Por la noche se celebró en el Ayuntamiento una velada literario-musical en honor de la Virgen Inmaculada. El alcalde que coadyuvó a las fiestas era Jesús Fernández Lomana.
Crecía el fervor del pueblo de Carrión por su monumento erigido en la plaza de Santa María.
He aquí la consigna señera de esta fiesta memorable: Tota pulchra es Maria et macula originalis no est in Te. La verja fue costeada, en parte, por el clero de Carrión. El precio excedió en mucho el presupuesto aprobado. La corona con las doce bombillas la consiguió el Hermano González del Ayuntamiento.
En 1973 se arregló el jardín de la Plaza de Santa María y se construyó el pedestal actual, con fuente de cuatro caños. La fuente funcionó durante varios años, pero luego se secó, y se aprovecharon las piedras de contención de aguas para la fuente del Parque del Plantío.
.
En la base de la columna hay varias placas conmemorativas:
-Una recuerda que fue erigido en su Año Jubilar (1.905).
-Otra recordando la consagración de la ciudad al corazón de María, del 8 de Diciembre de 1.954. -Una tercera, de 2.005, en la que se rememora nuevamente el Centenario de la consagración de la ciudad a la Inmaculada.
NUESTRA SEÑORA DE LA CONCEPCIÓN DEL CARPIO
En la Plaza de El Triunfo se alza el Monumento a la Inmaculada, erigido en 1803 por doña Salvadora de Ferreira y Ripa, para conmemorar la protección mariana sobre la ciudad con ocasión de la peste que había asolado a la provincia y que habían sufrido los pueblos limítrofes.
El modelos, aunque más pequeño, es similar a otros triunfos que se levantaron en Andalucía en el siglo XVII, y que tienen su precedente en el Triunfo de Granada (donde se realizó el primer Triunfo dedicado a la Inmaculada Concepción) sobre todo en cuanto en cuanto la formas de pedestal y columnas de cortes clásicos, pero la Virgen mantiene la composición y el movimiento característicos de las obras del período barroco.
Realizado en piedra, está formado por un alto basamento donde apoya una columna con capitel compuesto, sobre el que descansa la imagen de la Inmaculada.
En el basamento podemos leer la siguiente inscripción: “Se puso este Triunfo a expensas de Doña Salvadora de Ferreara y Ripa en el año de 1803, en agradecimiento de haber librado a este pueblo de la peste en el intermedio de tres siglos”.
Declarado que fue el dogma de la Inmaculada Concepción de la Virgen María por el papa Pío IX el 8 de diciembre de 1854, desde 1903 se preparaba la diócesis palentina para festejar los 50 años jubilares de esta definición dogmática, y se proyectaba levantar un monumento en la plaza de la Catedral de la capital.
También en Carrión tuvieron lugar los preparativos de la fiesta, unidos en un solo corazón los externos de San Zoilo y especialmente las mujeres católicas y la congregación de Hijas de María.
Por aquel tiempo estaba destinado en Carrión el hermano coadjutor Álvaro González, quien vivía en San Zoilo con el cargo de comprador.
Cuando supo lo que pretendían hacer en Palencia, animado por Francisca Javiera del Valle, procuró y, con su ayuda, consiguió la piedra de las ruinas del monasterio de la abadía de Benevívere y animó al padre Modesto, director de las Hijas de María, a levantar un monumento a la Inmaculada. Convocaron a los párrocos y al Ayuntamiento y quedó formada una junta para recaudar el dinero, desmontar la piedra y levantar el monumento, y lo que faltase lo pondría el Ayuntamiento.
Llegó el día de la Inmaculada de 1904, y el pedestal estaba terminado, pero sin estatua.
Los carrioneses se consolaron con la leyenda de oro de la fiesta y el canto de esperanza de los poetas. Entraba el año 1905 sin resolver el problema. El padre Modesto enfermó y falleció en abril.
Por fin la estatua llegó de Roma. Se consiguió el dinero gracias al padre Suárez, que ocultamente lo recibió como entrega piadosa bajo riguroso secreto de confesión.
La imagen es de hierro bronceado, copia de la que existe en la plaza de España de Roma e igual a la que representa un cuadro en el monasterio de Santa Clara de Carrión.
Lucen doce bombillas en su corona, y la imagen se ilumina por la noche con potentes focos.
La inauguración tuvo lugar el domingo 19 de noviembre de 1905, día tempestuoso de viento y agua. Por la noche hubo una espléndida iluminación en toda la ciudad y un percutir caliente de tambores, desfiles y alegría.
El pueblo todo atronaba con sus cánticos y júbilos. En la plaza y en la iglesia de Santa María florecían las aspiraciones de las almas buenas. El monumento lucía un gigantesco anagrama de María.
Por la noche se celebró en el Ayuntamiento una velada literario-musical en honor de la Virgen Inmaculada. El alcalde que coadyuvó a las fiestas era Jesús Fernández Lomana.
Crecía el fervor del pueblo de Carrión por su monumento erigido en la plaza de Santa María.
He aquí la consigna señera de esta fiesta memorable: Tota pulchra es Maria et macula originalis no est in Te. La verja fue costeada, en parte, por el clero de Carrión. El precio excedió en mucho el presupuesto aprobado. La corona con las doce bombillas la consiguió el Hermano González del Ayuntamiento.
En 1973 se arregló el jardín de la Plaza de Santa María y se construyó el pedestal actual, con fuente de cuatro caños. La fuente funcionó durante varios años, pero luego se secó, y se aprovecharon las piedras de contención de aguas para la fuente del Parque del Plantío.
.
En la base de la columna hay varias placas conmemorativas:
-Una recuerda que fue erigido en su Año Jubilar (1.905).
-Otra recordando la consagración de la ciudad al corazón de María, del 8 de Diciembre de 1.954. -Una tercera, de 2.005, en la que se rememora nuevamente el Centenario de la consagración de la ciudad a la Inmaculada.
NUESTRA SEÑORA DE LA CONCEPCIÓN DEL CARPIO
En la Plaza de El Triunfo se alza el Monumento a la Inmaculada, erigido en 1803 por doña Salvadora de Ferreira y Ripa, para conmemorar la protección mariana sobre la ciudad con ocasión de la peste que había asolado a la provincia y que habían sufrido los pueblos limítrofes.
El modelos, aunque más pequeño, es similar a otros triunfos que se levantaron en Andalucía en el siglo XVII, y que tienen su precedente en el Triunfo de Granada (donde se realizó el primer Triunfo dedicado a la Inmaculada Concepción) sobre todo en cuanto en cuanto la formas de pedestal y columnas de cortes clásicos, pero la Virgen mantiene la composición y el movimiento característicos de las obras del período barroco.
Realizado en piedra, está formado por un alto basamento donde apoya una columna con capitel compuesto, sobre el que descansa la imagen de la Inmaculada.
En el basamento podemos leer la siguiente inscripción: “Se puso este Triunfo a expensas de Doña Salvadora de Ferreara y Ripa en el año de 1803, en agradecimiento de haber librado a este pueblo de la peste en el intermedio de tres siglos”.
miércoles, 5 de diciembre de 2018
ESCULTURAS DE LA INMACULADA
Inmaculada, parroquia de Siruela
Inmaculada Concepción. Pedro de Sierra, 1735. Museo Nacional de Escultura. Valladolid, España.-
Catedral de Segovia escultura barroca que se custodia en la capilla de la Concepción de la catedral de Segovia
La capilla de la Concepción de la catedral de Segovia fue construida en 1531 a costa del cabildo catedralicio, que en 1621 encargó a Antonio de Herrera Barnuevo, escultor de Felipe IV de España, la imagen de la Virgen titular.
El escultor siguió el mismo modelo que años antes había utilizado para la Imaculada Concepción que realizó para el monasterio de las Descalzas Reales de Madrid. La imagen mariana se ubica en la hornacina del retablo que se ubica en el centro del testero de la capilla, realizado en madera dorada y policromada y de pequeñas dimensiones.
La escultura presenta como eculiaridad una decoración a base de vidrios engastados, esferas de vidrio doradas y estrellas metálicas en el manto.
Inmaculada de la iglesia de San Julian de Sevilla
Se atribuye a Alonso Cano
En la Iglesia de San Julián, de Sevilla, está una de las imágenes de la Inmaculada Concepción más bellas de esta ciudad.
Se libró increíblemente del incendio de esta iglesia en 1932, y es una de las representaciones más significativas del misterio de la Inmaculada Concepción, en Sevilla.
Este gran artista del siglo XVII español, que destacó como escultor, pintor, arquitecto, grabador, etc. nació en Granada, y en 1614 se trasladó a Sevilla; dos años más tarde entró como aprendiz en el taller del pintor Francisco Pacheco, donde debió coincidir con Velázquez.
Más tarde entró también a trabajar con Martínez Montañés, cuya influencia aparece claramente en esta imagen de la Inmaculada, hasta el punto que haya sido atribuida algunas veces a Montañés.
Como en 1638, el Conde-duque de Olivares le llama a la corte en Madrid, es muy probable que esta imagen de la Inmaculada fuera realizada por Alonso Cano antes de 1638 , fecha en que trabajó en Sevilla.
El estilo idealista y reposado que Alonso Cano muestra en sus obras aparece en esta Inmaculada. El hecho de que haya colocado solamente dos cabezas de ángeles a los pies de la Virgen, y la misma descripción de estas cabezas, parece un punto clave para determinar la autoría de Alonso Cano, ya que en las Inmaculadas de Montañés suelen aparecer más frecuentemente una o tres cabezas de ángeles.
En cualquier caso, es una obra muy parecida a la imagen de la Inmaculada que hay en el altar mayor de la Parroquia de San Andrés, de Sevilla, que es atribuida a Martínez Montañés.
Todas estas esculturas de la Inmaculada que existen en Sevilla son de una belleza singular y con caracteres definidos de la escuela sevillana. Cuando Alonso Cano marcha a Granada en 1652, realiza un tipo de imágenes de la Virgen inconfundible, con la túnica y el manto recogidos por la parte baja, como en la famosa de la sacristía de la Catedral de Granada que hizo en 1654.
Inmaculada de la iglesia de San Pedro de Madrid