NO TE OLVIDES DE LOS HUMILDES , SEÑOR
En aquel tiempo, al salir de la sinagoga, los fariseos planearon el modo de acabar con Jesús.
Jesús sabe que no ha llegado su hora, no ha terminado de cumplir su misión.
Pero Jesús se enteró, se marchó de allí y muchos lo siguieron.Él los curó a todos, mandándoles que no lo descubrieran.
Jesús nos cura de todo lo negativo que hay en nosotros,
Jesús, no tiene miedo, se marcha para seguir cumpliendo su misión.
A El nadie le quita la vida, la entrega libremente para salvarnos porque sabe que en cada uno de nosotros hay bien y mal y quiere librarnos del mal, el pecado.
Así se cumplió lo dicho por medio del profeta Isaías:
«Mirad a mi siervo, mi elegido,
mi amado, en quien me complazco.
Sobre él pondré mi espíritu
para que anuncie el derecho a las naciones.
No porfiará, no gritará, nadie escuchará su voz por las calles.
La caña cascada no la quebrará,
la mecha vacilante no la apagará,
hasta llevar el derecho a la victoria;
en su nombre esperarán las naciones».
Mateo nos describe el estilo de vida de Jesús: sencillez, humildad, mansedumbre, el acoger, el sanar y perdonar.
Jesús se retira, pero no huye, muchos le siguen y El continuo curando los males de todos. Asi es Jesús y asi actua,
El evangelista nos presenta a un Mesías lleno de espïritu manso y discreto que no alardea de sus exitos.
Su actuación es modelos para los cristianos que le seguimos, un espejo donde mirarnos.
Que bueno SEÑOR seguir tus huellas anunciando con humildad sin espíritu de grandeza tu Reino a todos los necesitados en palabras y obras.
No hay comentarios:
Publicar un comentario