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sábado, 27 de abril de 2024

ORACION DE LA MAÑANA DE LA PASCUA. 3ª,4º Y 5º DOMINGO

QUINTO DOMINGO



UNIDO A TI, Y LUEGO VENDRÁ LO DEMÁS
 Como sarmiento, fundido a Ti Señor seré yema de perdón y de reconciliación Ante un mundo penetrado por el rencor, sabré que Tú me envías a ser instrumento de tu amor Porque sin Ti, Señor, la vida es corta y, los días de esa vida, son fruto que despuntan pero, a la vuelta de la esquina, pronto se malogran. Por ello, Señor, que primero este unido a Ti Que no me preocupe tanto de lo que hago ni, tampoco Señor, de aquello que no hago Que, acercándose la noche, siempre me pregunte: ¿He estado unido a Ti, Señor? Y, entonces, sólo entonces…el fruto amanecerá en las ramas de mi vida Y, entonces, sólo entonces…el fruto aparecerá sabiendo que de Ti viene y en mi florece
 UNIDO A TI, LUEGO VENDRÁ LO DEMAS Porque siento que, muchas veces Señor, me detengo en mis propias fuerzas considero que, todo lo que acontece, se debe a mi esfuerzo y talento, a mi sudor y empeño, a mi inteligencia, creatividad e impulsos. Porque siento que, muchas veces Señor, soy amo de mi propia hacienda cuando, en realidad, es toda tuya.
 UNIDO A TI, LUEGO VENDRÁ LO DEMÁS 

Sarmiento con savia; para sentir que te pertenezco, Señor. Sarmiento con cuerpo; para sostener abundancia de fruto 
Sarmiento que se doble; para que pueda ofrecer el perdón Sarmiento que sea fuerte; para que pueda resistir los vientos del combate 
Sarmiento dócil; para que entre en mi casa, quien llame a mi puerta Sarmiento humilde; para purificarme de las yemas que no dan fruto Sarmiento limpio; para que todo lo que haga sea digno de Ti

 Sarmiento sencillo; para que no pretenda lo que no pueda dar Sarmiento unido a la vid; para que no muera en la soledad Sarmiento reconociendo a la vid; para que sea siervo suyo 
Sarmiento viviendo de la vid; para que no me lo crea demasiado Sarmiento explotando en yemas; para que me sienta útil Sarmiento dejándome cuidar; para que busque la perfección Sarmiento con el abono de la oración; para que me des lo que pida 


Sarmiento con el agua de la fe; para que no me impaciente Sarmiento con el vino de la esperanza; para que no desespere 
Sarmiento en compañía de otros; para que viva en familia cristiana Sarmiento flexible; para que el Espíritu me moldee 
Sarmiento firme; para que los caprichos no me seduzcan Sarmiento recio; para que pueda sostener los racimos del amor 
Sarmiento prudente; para que otros encuentren en mí serenidad Sarmiento alegre; para que transforme la tristeza en alegría 
Sarmiento mirando al cielo; para que nadie me corte y me deje tirado en la tierra Sarmiento mirando a la tierra; para que no olvide de dar el grano necesario
 Amén
D
Siento que soy algo, y resulta que soy poco y nada y, después de afirmarlo, veo, Señor, que me creo, grande e imprescindible ¿Cuándo entenderé que, sin Ti, no hay luz ni vida? ¿Cuándo comprenderé que, si me separo de Ti, mi vida es fracaso, cruz, pena sin gloria?
L

En el Evangelio de hoy el Señor nos ofrece la PAZ. La paz a la que se refiere es el resultado de una unión íntima con Él. Es un fruto de la presencia del Espíritu Santo en nuestras almas, y que hay que pedir en la oración humilde.
M
“Señor, haz de mi un instrumento de tu paz. Que donde hay odio, yo ponga el amor. Que donde hay ofensa, yo ponga el perdón. Que donde hay discordia, yo ponga la unión. Que donde hay error, yo ponga la verdad. Que donde hay duda, yo ponga la fe. Que donde hay desesperación, yo ponga la esperanza. Que donde hay tinieblas, yo ponga la luz. Que donde hay tristeza, yo ponga la alegría.
X
Vivir en ti, Señor, es creer en tu Palabra. ¡Aumenta mi fe! Vivir en ti es confiar en tus caminos. ¡Aumenta mi esperanza! Vivir en ti es amarte con todo el corazón. ¡Aumenta mi amor! Concédeme vivir en ti cada día mejor, y jamás permitas que me separe de ti. Amén.
J
Dios te salve, María… Tú eres la llena de gracia, llena de Dios. Tú eres la causa de nuestra alegría. Acompáñame en esta oración para que permita a Dios llenar más mi vida y así me abra a la alegría que Él me quiere dar.

V
Señor Jesús, creo en ti, pero ayúdame a creer con firmeza. Espero en ti, pero ayúdame a esperar sin desconfianza. Te amor, pero ayúdame a no volver a ofenderte.
S
Alejame Señor de ese mundo que me quiere poner en contra de Ti. 


CUARTO DOMINGO



¡CUANDO MAS TE NECESITO, SEÑOR! Javier Leoz 
Te asomas, despertándome de mi letargo cristiano y me pones en guardia frente a tantas cosas que debilitan y distorsionan mi amistad contigo. Cuando más ten necesito, Señor, eres cayado en el que me apoyo para sujetarme nunca caer y siempre levantarme. Cuando, veo que mi nombre se pierde el abismo, suena tu voz clara y nítida: ¡AMIGO!
 Y, compruebo una y otra vez, que eres Pastor que guarda mis pensamientos en el día y hasta vela mis sueños entrada la noche. Sí; Jesús. Siempre surges en el momento oportuno. Conoces mi vida como nadie y, a pesar de estar tan llena de briznas, la pones sobre tus hombros para, una y otra vez, redimirla de sus pecados y dolencias. Y es que, Tú, Señor, como Pastor diligente, oportuno y puntual te haces el encontradizo cuando más te necesito Si, debilitado por mis esfuerzos, pienso en el abandono me elevas sobre tus hombros me cubres con tus brazos y me rodeas con tus Palabras de liberación Si, paralizado por mis errores, miro al fracaso susurras palabras de consuelo a mis oídos: ¡Yo estaré contigo todos los días! Y es que, Tú, Señor, como Pastor que conoces mis atajos y mis dudas te presentas cuando más te necesito. Si, confundido por mil ideas, temo desertar me confirmas en la fe verdadera: ¡YO SOY! 

Si, añorando poder y riquezas, dirijo mis ojos hacia el escaparate del mundo me llevas ante el tesoro de tu amor. Y es que, Tú, Señor, como Pastor, no quieres que –aún siendo débil oveja- me pierda y me vaya lejos de tu rebaño. Por eso y por tantas cosas, Señor, te doy gracias bendigo tu nombre avanzo en tus sendas proclamo tu Palabra y, hoy como ayer, te digo: ¡TÚ ERES EL BUEN PASTOR! Apareces siempre cuando más te necesito


TERCER DOMINGO DE PASCUA





QUEDATE, SEÑOR, NO PASES DE LARGO (3º DE PASCUA) Que, si ahora todo es luz, sin ti y cuando te vayas, volverá a ser oscuridad Que, si ahora veo tu grandeza, sin Ti y cuando te vayas, sólo tocaré mi pobreza 
QUEDATE, SEÑOR, NO PASES DE LARGO Porque, mis dudas con tu Palabra, se convierten en seguras respuestas Porque, mi camino huidizo y pesaroso se transforma en un sendero de esperanza en un grito a tu presencia real y resucitada 
QUEDATE, SEÑOR, NO PASES DE LARGO Que, contigo y por Tï, merece la pena aguardar y esperar Que, contigo y por Ti, no hay gran cruz sino fuerza para hacerle frente Que, contigo y por Ti, la sonrisa vuelve a mi rostro y el corazón recuperar su vivo palpitar
 QUEDATE, SEÑOR, NO PASES DE LARGO Porque, contigo, mi camino es esperanza Porque, contigo, amanece la ilusión Porque, contigo, siento al cielo más cerca Porque, contigo, veo a más hermanos y siento que tengo menos enemigos Porque, contigo, desaparece el desencanto y brota la firme fe de quien sabe que Tú, Señor, eres principio y final de todo. Amén.
L
M
X
J

V

Caminar con Él y detrás de Él, tratando de poner en práctica su mandamiento, el que dio a los discípulos precisamente en la última Cena: “Como yo os he amado, amaos también unos a otros
S

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