Lectura del santo Evangelio según Lucas (16, 19-31)
Había un hombre rico que se vestía de púrpura y de lino y banqueteaba cada día. Y un mendigo llamado Lázaro estaba echado en su portal, cubierto de llagas, y con ganas de saciarse de lo que caía de la mesa del rico. Y hasta los perros venían y le lamían las llagas.
Recibiste bienes, y Lázaro males: ahora él es aquí consolado, mientras que tú eres atormentado
El corazóm tiene muchas sensaciones poositivas: nos descubre la bellezacridad, del amor, de los buenos sentimientos, del bien pero muchas veces nos traicina y nos lleva al otro lado y nos lleva a la sexualidad, al placer y a disfrutar de lo que vemos y tocamos.
Lazaro tuvo ese problema era mendigo del amor de Dios le pudo el corazón hacia Dios, no era un problema y si una virtud....no tenía nada pero lo tenía todo.
Personas que tienen todo pero le falta ño más importante y por supuesto no es la salud, el dinero pero tienen falta de equilibrio emocional y total le falta lo principal. Lazaro fue un mendigo y nosotros tambien somos mendigos porque a veces necesitamos algo: una sonrisa, un saludo, unas palabras, etc, mendigos del amor de Dios y no nos damos cuenta porque mendigamos otros amores, placeres y riquezas.
Esto le pasó al rico Epuñón era más mendigo que nadie y no lo sabía, lo tenía todo y le faltaba lo más importante ....el cielo
Epulón y Lazaro , los dos eran mendigos, uno mendigo de las cosas del mundo, era correcto y cumplia todo ......el corazón le traicionaba hacia el tener, el poder olvidadndo a los que no tenían y no posían.
¿ que mendigo soy ?
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