Páginas

martes, 20 de octubre de 2020

SER RICO O POBRES ANTE DIOS

 

El Evangelio de hoy nos plantea la cuestión de ser ricos o pobres ante Dios, es decir, nuestra actitud ante los bienes materiales.

 ¿Quién es rico ante Dios? Si tenemos que responder a este interrogante diríamos que el que su vida la tiene abierta a la escucha de su Palabra, el que tiene un corazón acogedor de la misma, el que intenta hacerla vida y se deja transformar por ella, el que sabe poner al servicio de los hermanos su persona, su tiempo, sus bienes, más o menos, no es cuestión de cantidad sino de totalidad, estos serían ricos ante Dios.

 El Papa Benedicto XVI comentó este mismo pasaje en el ángelus del 5 agosto de 2007: “La palabra de Dios nos estimula a reflexionar sobre cómo debe ser nuestra relación con los bienes materiales. La riqueza, aun siendo en sí un bien, no se debe considerar un bien absoluto. Sobre todo, no garantiza la salvación; más aún, podría incluso ponerla seriamente en peligro.

 En la página evangélica de hoy, Jesús pone en guardia a sus discípulos precisamente contra este riesgo. Es sabiduría y virtud no apegar el corazón a los bienes de este mundo, porque todo pasa, todo puede terminar bruscamente.



 Para los cristianos,  no nos dejemos dominar por la avaricia y el egoísmo, sino que busquemos siempre lo que vale delante de Dios.

Que nos llevemos al Cielo aquello que nos deje entrar en el Cielom ;

-la Fe, hemos creido en El.

- la Esperanza, hemos esperado en El.

. la Caridad hemos intentado hacer el bienm cada uno en su medio de vida. 





No hay comentarios:

Publicar un comentario