PLAZA DE ROMANILLA, GRANADA

Origen:
 Durante siglos, corazón del principal mercado de abastos de Granada, mismo lugar donde estaba la principal actividad comercial de la Granada musulmana -zoco-



 Historia:
En pleno centro comercial de Granada, hace décadas tenía aún tenderetes de frutas y verduras -que perduran todavía hoy-. En ella también se localizaba la 'Caseta de Repeso', es decir, de comprobación del peso y donde se presentaban las denuncias, en caso de fraudes.

 Para la comprobación del peso se utilizaba una pequeña 'romana', llamada popularmente 'La Romanilla', origen del nombre de la plaza.



También conocida como Plaza de las Palmeras, se encuentra muy cerca de la Catedral. Para muchos, es uno de los rincones más típicos y agradables del centro de Granada. Además, esta plaza está presidida por una estatua homenaje a los aguadores, personajes típicos del paisaje granadino hasta no hace muchos años.


A principios del siglo XVII la mayor parte de esta zona era propiedad del comerciante genovés Rolando de Levanto.


Desde 1636 el lugar estaba ocupado por el Convento de las Religiosas Capuchinas.
1837. Con la llegada de la desamortización, en la primera mitad del siglo XIX, el jefe político de Granada, Agustín Romero, mandó derribar el convento de las Capuchinas. Con sus escombros y los del también desaparecido convento de los Agustinos, formaron la explanada que se elevaba en el centro de la plaza de Bibrambla.

 Tras la desaparición del convento de las Capuchinas, el solar se adoquinó y urbanizó como plaza y mercado público de verduras en 1842.
 Este espacio fue bautizado con el nombre de plaza de la Libertad.
 A finales del siglo XIX se construye en “La Plaza de la Libertad” un mercado de obra, coexistiendo junto con el de San Agustín, a escasos metros.




 En 1973 el mercado de la Romanilla se derribó.


 Actualidad:

Ahora, es un espacio en el que, diariamente, convive el turismo con esas personas que, durante toda su vida, han regentado puestos de fruta y frutos secos. Parada obligada tanto para visitantes -que cámara en mano no dejan de disparar el flash, sorprendidos por la venta de estos productos en la calle- como para granadinos -quienes prefieren comprar este género tan natural-.

A mediodía, aunque también por la tarde, sus terrazas son un atractivo más en el que tomar un aperitivo, disfrutando de ese ambiente de plaza de toda la vida.

Centro Federico Garcia Lorca



A través de sus actividades culturales, ofrece al público una selección de excelencia en el ámbito de la creación contemporánea en literatura, música, artes plásticas, pensamiento, cine, teatro, artes audiovisuales, etc. convirtiéndose en un referente cultural permanente, no sólo para la ciudad de Granada, sino también, para Andalucía y España, con relevancia internacional.