Posiblemente Sapieha quería que aquel joven sacerdote con un futuro prometedor, después de adquirir una experiencia rural, la adquiriese también en un ambiente urbano, más culto y más de acuerdo con su preparación.
Sabía que era peligroso para un sacerdote tratar de organizar reuniones o asambleas, aunque se les diera un carácter intelectual o académico. Decide entonces utilizar una de sus grandes aficiones. los espacios libres y el deporte.
Para ello organiza excursiones, acampadas, prácticas de esquí o de remo, en aquellos lugares que también conocía.
Porque es con los jóvenes donde el cura Wojtyla se siente verdaderamente en su salsa siendo para ellos a la vez compañero, amigo, maestro y pastor. El recuerdo de Jan Tyranowski -que ha muerto santamente mientras él estaba en Roma- se le quedará clavado para siempre en el alma y descubrirá que son los jóvenes su verdadera vocación.
Para muchos en aquel momento una vocación sospechosa porque en la Polonia de aquel tiempo -cuando el vestir sotana era casi tan dogmático como la Santísima Trinidad- un sacerdote en pantalón corto y camiseta era algo absolutamente escandaloso. Hasta el punto de que Karol pide a los muchachos que le llamen «tío Karol», en polaco wujer Karol, en lugar de «padre», para no escandalizar a la buena gente de los caseríos de montaña.
sus montañas favoritas " las Tartras"
Durante el mes de mayo las salidas eran los santuarios marianos: Kalwaria y Czestochowa.
Santuario de Kalwaria
El primero de noviembre de 1950, Pio XII, proclama un nuevo dogma: la Asunción de la Virgen. Para celebrar este acontecimiento, el vicario de la capilla universitaria de San Froilan, se reunió, como de casualidad con un numeroso grupo de jóvenes en el templo de la Reina de los polacos: Czestochowa
En noviembre de 1951, su obispo le ordenó que dejara sus obligaciones parroquiales, con una finalidad: obtener otro doctorado.
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